Organigrama Divino: La belleza de las cúpulas poblanas.

Cuando nos desenvolvemos en alguna empresa mediana o grande, entendemos muy bien lo que significa el Organigrama, es decir, el escalafón que se forma de acuerdo a las responsabilidades que cada persona tiene dentro de la organización. Esto es algo común en la vida moderna.

En estas organizaciones, en ocasiones existe el “Corporativo” esa suntuosa oficina en donde los altos jerarcas de la empresa laborar, controlan y dirigen las acciones de docenas, en ocasiones cientos de personas y a niveles de globalización llegan a ser miles los que son controlados desde ese “Corporativo”.

En las muy cómodas y bien diseñadas oficinas corporativas, lo que sobra es el espacio, cada cosa está en su lugar y el ambiente que se respira, aunque agobiante, es de lujo y comodidad, normalmente es en el piso más alto, en donde despacha quien tiene la mayor jerarquía en esa empresa, el CEO, creo así se le denomina.

En ocasiones hay que tomar un elevador para llegar a ese piso, en esa torre, al igual que en la mítica Babel se presume competir con el verdadero supremo, el que está en verdad arriba de todos, por encima de todos, por consecuencia, es ese supremo, el verdadero, el que nos hace voltear la vista a lo más alto, me refiero al CEO de todos los CEOs del mundo.

Hay un enorme misticismo en las cúpulas de los templos católicos, especialmente los del siglo XVII y XVIII que encontré en Puebla, siendo todos estos templos construidos con el concepto de la cruz latina, originan al centro, en ese encuentro de de los dos parámetros, algo que bien podemos considerar como el encuentro de los cuatro puntos cardinales, o de los cuatro ángulos de, mundo de los mortales, el punto preciso para levantar una cúpula, esa que desde la antigua Roma ha impactado a todos quienes pueden entrar en estas espléndidas construcciones.

El latín es la lengua que nos adentra más al misticismo, con frases cortas y contundentes, extraídas de años y años de predicamentos, Ave María - Gratia Plena – Dominis Tecum – Benedicta Tu. (Dios te salve María, llena eres de gracia, el Señor está contigo, bendita eres.)

Sanctus Deus – Sanctus Fortis – Sanctus Immortalis – Miserere Nobis, esto lo encontramos en la cúpula del Templo de Nuestra Señora de la Soledad.

In Solitudinem – Traptuebest Filus – E Jus Deum – Et Mulier Facit. No importa la religión a la que pertenezcamos, el CEO siempre se ubicará en el CIELO, de allí la majestuosidad de sus templos, de allí la grandeza de sus edificios, de allí el misticismo que encierran esas magistrales cúpulas de la fabulosa Puebla, la de los Ángeles.

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