Estaba en esa caja de Pandora, sacando un documento, luego el otro, siempre con mucho cuidado pues son papeles que sobreviven a la Revolución, a la Cristiada, a incendios, inundaciones, terremotos y lo peor, a la inconsciencia (desconocimiento) y que los podemos ver, casi, casi acariciar, luego de más de un siglo... en esas estaba cuando el papel que venía era un periódico de fecha 3 de octubre de 1887, marcado como número extraordinario, de 10 centavos de precio y publicado en México... pero en francés.
En Route es el nombre del periódico que tenía la virtud de publicarse de forma berlingue, las mismas noticias, primero en francés y luego, pasaba a En Camino y aparecen en español. Fue ya en esta sección que entendí de lo que se trataba, de aquel hecho que permaneció algún tiempo semi oculto, aunque era bien sabido pero, tal vez por la Revolución, pasó luego al olvido pues ya para entonces a pocos, por no decir que a nadie, le interesaba lo ocurrido a Porfirio Díaz ya que, ese movimiento "revolucionario" utilizó su imagen como la del dictador, que había abusado de México. ¿Abusado? bueno, ese es otro tema, lo que nos interesa ahora es lo del atentado del 16 de Septiembre... de 1887.
Quizá tú, que esto lees, supiste del acontecimiento gracias a la película El Atentado que, dentro del paquete fílmico del Bicentenario se realizó con estupenda calidad y poca difusión, como lo fueron las otras películas del paquete: El baile de San Juan y la de Hidalgo la historia jamás contada, al menos son las únicas tres de las que me enteré usaron fondos del tal paquete fílmico. De pronto pensé que El Atentado había sido una historia relacionada al personaje y no un hecho real, fue cundo vi el periódico que hoy comparto que supe que los acontecimientos fueron reales.
En lo personal guardo una anécdota, que publiqué en su momento aquí en El Bable, pues, andaba por el Centro Histórico de la ahora nombrada CDMX, cuando, justo frente a lo que fue la acequia de la Alhóndiga, vi una casa que tenía pintados anuncios de productos de finales del siglo XIX, quedé maravillado, luego que me acerqué reconocí uno, el de los Pulques de Ometusco, caminé en rededor y vi, pegadas en la pared avisos, novenas, y no sé cuánta cosa más, todo me pareció extraordinario, el que quedara tanta de la llamada "memorabilia" de la época...
Luego de dos años, al reconocer una imagen de la filmación de la película El Atentado, me di cuenta que eso que vi fue la ambientación colocada para poner en época lo que la película contaba.
Lo que escribió En Ruta lo puedes leer a continuación, lo pongo en imágenes de gran formato para que te sea más fácil:
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