Tenemos un 15 de Septiembre más, uno más en el que celebraremos, que recordaremos con la Ceremonia del Grito, el inicio de la guerra de Independencia. Una vez más recordaremos que, también hoy, 15 de Septiembre, es la fecha que el calendario litúrgico de la Iglesia Católica establece éste como el día de San Porfirio y, por azares de la vida las fechas coincidieron y, dicen por ahí, que fue ese el pretexto, el de San Porfirio, para que Don Porfirio estableciera el 15 como un día de celebración pero, hay que saberlo, ya desde antes que don Porfirio estuviera sentado (por 30 años) en la silla presidencial, el 15 se celebraba como la víspera de la Fiesta de Independencia de México. Todo mexicano que se precie de serlo debe saber que fue el 16 de Septiembre, a la hora "prima" que se dio el Grito, esto quiere decir que el Domingo 16 de Septiembre de 1810 a las 6 de la mañana fue cuando eso que nosotros, por tradición, celebramos a las 11 de la noche del día anterior, en plena víspera. Pero fue el 16, insisto.
Creo que con esto del 15 ratificamos aquello de que somos nosotros, los ciudadanos, los que vamos creando las tradiciones, y al pasar los años esas tradiciones se vuelven ley y si alguien dijo por ahí, desde hace 150 años, o tal vez más, que debemos festejar el Grito el 15 de Septiembre a las 11 de la noche, pues así se nos quedó ya establecido a mi generación y a las precedentes y a las que siguen, el 15 se volvió ley, sí, pero no olvidemos que el Grito se dio el 16 de Septiembre a las 6 de la mañana ¿alguien se levantará a esa hora para dar el Grito el 16? Creo que no.
Ahora, de unos años para acá, desde que los supermercados se expandieron por todo el territorio nacional se nos instituyó otra cosa: la "Cena Mexicana", que yo recuerde, antes no había tal cosa; si bien había las Kermeses, que antes se denominaban "Jamaicas", las había por muchas, pero en forma colectiva, ahora esa tradición pasó a ser un festejo familiar, o de amigos y vemos que en supermercados y tiendas especializadas, como las de telas, hay mercancía específica para la Noche Mexicana que ya se nos instituyó como parte de nuestro calendario ritual y festivo que todos los mexicanos tenemos.
Pero lo que hoy no ocupa no son esas reflexiones en torno al "celebrar o no celebrar...", sino puntualizar algo del festejo del 15 de Septiembre, y más aun, recordar lo que sucedió hace más de un siglo, cuando, en todo México se celebraron las Fiestas del Centenario, las cuales marcarían a casi todas las poblaciones de México, no por haber sido ese el año en que comenzó la Revolución de 1910, sino porque, ya desde 1907, se había establecido una Comisión Nacional del Centenario de la Independencia y a cada población se le pidió realizar una obra que fuera para el uso de todos los habitantes de la ciudad, una obra que dejara huella y que se volviera emblemática de tan importante acontecimiento: el Centenario de la Independencia. En el caso del estado de Guanajuato se estableció, entre otras cosas, que una de las calles principales de cada población llevaran el nombre de Hidalgo y, además se marcaran con una placa realizada en uno de los talleres de mayor prestigio en esa época, el de Jorge Unna en San Luis Potosí.
Sobre esas placas conmemorativas del estado de Guanajuato te he contado varias historias las veces que las he ido encontrando, y lo que hoy veremos es el listado, en número, de las obras que se ejecutaron dentro de lo marcado por la Comisión Nacional, la establecida el 1º de Abril de 1907, cuando se establecieron los lineamientos para llevar a cabo las Fiestas de Centenario.
En Salamanca, lugar de donde soy originario y en donde me encuentro actualmente, la obra emblemática del Centenario fue el Kiosco del más puro estilo francés propio de la época que conocemos como Porfiriato; la toma fue hecha el día de la inauguración, el 16 de Septiembre de 1910, alcanzamos a ver parte de la concurrencia, y como las reglas de urbanidad lo marcaban, los hombres de un lado, las mujeres del otro. La flecha marcha la placa conmemorativa del Centenario.
En la capital del Estado de Guanajuato la obra emblemática fue el Mercado Hidalgo, el cual fue inaugurado dentro de las Fiestas del Centenario, y así podremos ir viendo, en cada estado del país, como su propia Comisión Estatal o Local, fue realizando las obras que, en total fueron 1,418 a lo largo y ancho de la República Mexicana. (Para ver sobre las obras realizadas en Agauscalientes, entra aquí.) Obras de los más distintos tipos, que fueron clasificadas de la siguiente manera:
Obras Públicas: que incluían las de agua potable, drenaje, pavimento, presas, puentes, alumbrado y banquetas. Vías Públicas: comprendidas avenidas, calles, calzadas y carreteras. Esculturas: que igual fueron bustos, estatuas, monumentos y columnas. Arquitectura: clasificadas en Consistoriales, Palacios Federales, Palacios Municipales, Judiciales, Legislativos y Embajadas. Servicios Urbanos, como lo fueron los asilos, hospitales, manicomios, mercados, panteones, teatros, lavaderos públicos, cárceles, comisarias, casinos, estaciones meterológicas y sismológicas. Mobiliario Público: como bancas, kioscos, viviendas, faros, placas conmemorativas y relojes. Espacios Abiertos: parques, paseos, jardines y plazas. Y una clasificación que tuvo un nombre particular: Arquitectura de la Educación, dentro de la cual se incluyó, además de las Escuelas, a las Bibliotecas y los Museos. (1)
Y estas fueron, de acuerdo al libro del señor Rafael Tovar y de Teresa (2), las obras que se ejecutaron para conmemorar el Centenario, en 1910:
325 Escuelas
136 Parques y Jardines
135 Placas Conmemorativas
130 Casas Consistoriales
98 Trabajos de Agua Potable
88 Monumentos
72 Kioscos
66 Edificios de Administración Pública
57 Calzadas
42 Mercados
42 Líneas de Telégrafos o Teléfonos
37 Sistemas de Alumbrado
37 Relojes Públicos
31 Cárceles
26 Panteones
24 Obras de Pavimentación
15 Presas
10 Bibliotecas
9 Hospitales
9 Portales
8 Teatros
7 Baños y Lavabos
6 Diques
2 Obras de Drenaje
2 Árboles del Centenario
1 Muelle
1 Sistema de Tranvía
1 Casa de Beneficencia
1 Crematorio de Basura.
Los gastos fueron elevados, no cuento con la cifra exacta, pero el detonante, en buena medida del movimiento de Revolución de 1910 no fueron estos gastos, sino los realizados en torno a las Fiestas Sociales, los brindis, los viáticos de las numerosas delegaciones, y cuantas cosas más podríamos agregar a la cuenta millonaria de las Fiestas del Centenario... dicen por ahí que Carmen Romero Rubio de Díaz mandó obsequiar pantalones y zapatos a todos los paisanos para que los usaran durante el mes de Septiembre y que los distinguidos visitantes no vieran la pobreza del país.
Como quiera, vemos en las 1,418 obras, que el número mayor fueron escuelas, y, en general, son obras de beneficio público. Podría identificar en esa larga lista algunas que se volvieron emblemáticas: el Mercado Hidalgo en Guanajuato, los Kioscos de varios pueblos del estado de Guanajuato, el Paseo del Centenario en Mazatlán y en San José del Cabo, el Crematorio de Basura en Chihuahua, el Árbol del Centenario que se plantó en el Parque Agua Azul de Guadalajara, el sistema eléctrico en Calvillo, Ags., el Monumento a Juárez en Cd. Juárez, el Palacio Municipal, hospital, teatro, mercado, panteón y rastro en El Oro, Estado de México, un puente en Chilpancingo, Gro., la Biblioteca en Villahermosa, Tab., y de más monumentos y placas... ni que decir.
Fuentes:
1.- Pérez Bertruy, Ramona. Obras emblemáticas del Primer Centenario de la Independencia Nacional. UNAM. Instituto de Investigaciones Bibliográficas. México. Documento electrónico.
2.- Tovar y de Teresa, Rafael. El último brindis de don Porfirio. 1910: Los festejos del Centenario. Santillana, México, 2012. pp.252-256
se me hizo muy interesante tu publicacion. me interesaria saber de donde obtuviste las fotos de construccion del mercado hidalgo debido a que hare una exposicion en la escuaela de el y si existen mas fotos al respecto podria hacer mi exposicion mas llamativa
ResponderEliminarSi mal no recuerdo, las obtuve en el Museo del Siglo XIX, en Guanajuato.
Eliminar