El día en que fue declarado San José Patrono General de la Nueva España.

Altar de San José en la Parroquia Antigua de Salamanca, Guanajuato.

978.- Este número que aparece a la izquierda nos dice que este es el artículo novecientos setenta y ocho que aparece en El Bable. Si me sigues desde hace un año, esto de hoy tal vez no te sorprenderá, si eres visitante nuevo te cuento que, además de los panteones y las fiestas de pueblo, otra de las debilidades que tengo es la hagiografía, es decir, los santos. No tanto sus castas y prudentes vidas, sino su representatividad en la Iglesia. Y no tanto para irles a rezar y pedir cosas, sino para saber el por qué aparecen "de bulto" en los templos. Uno que encontramos en practicamente todos los templos de México es Señor San José. Luego de buscar y buscar, finalmente doy con el documentos que me (nos) aclara la razón. Documento bastante antiguo pues data del 6 y 7 de noviembre de 1555 y que fue firmado por el segundo Arzobispo de México, fray Alonso de Montúfar. En la fotografía vemos a Señor San José en el Santuario del Señor del Hospital en Salamanca, Guanajuato.

En la Nueva España se introdujo la Religión Católica por los españoles, más específicamente por los frailes que acompañaban a Hernán Cortés, aunque más bien ellos venían para auxiliar al séquito que acompañaba al conquistador. Luego vendrían los franciscanos, dominicos, agustinos y, finalmente, los jesuitas. Para 1524, cuando solamente estaban en México los franciscanos sucedió la primer reunión, digamos que "técnica" en torno a las reglas a seguir (e imponer) para el culto en esta parte del Nuevo Mundo, allí se habló en torno a los sacramentos, especialmente el bautismo que era al que se le daba la mayor importancia. A esta reunión se le denominó: "Primera Junta Apostólica en Méjico". Vemos en la fotografía el retablo de San José en el templo agustino de San Juan de Sahagún en Salamanca, Guanajuato.

Ahora estamos viendo la imagen de San José en el templo de Santa María de Natívitas en Salamanca. Será bueno hacer una anotación en torno a la manera de representarlo pues, cuando lo vemos joven y a él solo, nos indica que es una imagen que seguramente será usada durante la novena de Navidad que tradicionalmente la conocemos como Posadas, siempre estará vestido en colores verde y amarillo-dorado. Esto nos indica (creo yo) que dentro de la dualidad en la que muchas religiones giran en torno, él, San José nos muestra la parte masculina, específicamente la tierra, pues si imaginamos los campos, más aun los del Bajío, ni que decir de los españoles (pensando que de allá nos llegó la Religión Católica), los campos se presentan cuando están en su máximo, en los tonos verde y dorado, cuando están ofreciendo sus frutos, específicamente el trigo. Luego veremos que hay otra representación del ya Señor San José acompañado de el Niño Jesús.

Esta es la imagen "de bulto" de Señor San José en el templo de Las Tres Caídas en Salamanca, Guanajuato. Para 1555, con la presencia de las tres ordenes (OFM, OP, OSA) sucede el Primer Concilio Provincial de Méjico, de allí se desprende un larguísimo documento en donde se asienta toda la política, gobierno, administración y policía que tendrá la Iglesia Católica en la Nueva España y dentro del inciso XVIII, que establece las fiestas de guardar se decreta una, la más importante de todas en ese momento, en la que se le rendirá a San José como el más importante de todos, decretándolo como Patrón General y lo dicen en esta forma:

"Y porque de parte de toda la república, así eclesiástica como seglar, con grande instancia nos fue suplicado mandásemos guardar y celebrar la fiesta del Glorioso San José, esposo de nuestra Señora y le recibiésemos por abogado y patrón de esta nueva Iglesia, específicamente para que sea abogado, é intercesor contra las tempestades, truenos, rayos y piedras con que esta tierra es muy molestada; y considerando los méritos y prerrogativas de este glorioso santo y la grande devoción que el pueblo le tiene, y la veneración con que de los indios y españoles ha sido y es venerado, S.A.C. (*) recibimos al dicho y glorioso San José por patrón general de esta nueva Iglesia; y estatuímos y ordenamos, que todo nuestro arzobispado y provincia se celebre su fiesta, de doble mayor, o primera dignidad, y se guarde de la manera que las otras fiestas solemnes de la iglesia se mandan guardar y celebrar, la cual se celebrará y guardará a diez y nueve días del mes de marzo, conforme a institución romana". (1)

(*).- Sacro Approbante Concilio.

Fuente:

Colección de cánones y de todos los concilios de la Iglesia Española. D. Juan de Tejeda. Tomo V. Imprenta de don Pedro Montero. Madrid, 1855.