De templos, calles e indulgencias por Michoacán

Estamos una vez más en Tarímbaro, el lugar cercano a Morelia que, de hecho, fue originalmente el sitio en donde se levantó la que sería la capital de la Provincia, pero luego fue movida al sitio en donde ahora se encuentra la antigua Valladolid, en el valle de Gayangareo. Aquí en Tarímbaro, recordarás hay un convento franciscano. Este también es el lugar de nacimiento del Santo Bernabé de Jesús Méndez, este santo es el que se venera en Valtierrilla, comunidad cercana a Salamanca y cuyos restos, es decir, sus reliquias están depositadas en la Catedral de Irapuato.

Pero lo que vemos ahora es el templo donde se venera a la Vírgen de la Escalera, imágen que, según la tradición fue pintada debajo de una escalera en le propio convento hacia 1576. Habrá que saber que existe un famosísimo relive hecho por Miguel Angel, una de sus primeras obras, que lleva precisamente ese mismo título, pero la tradición se remonta un poco más atrás cuando, se le atribuyó a San Agustín, en una de sus metáforas, equiparar a la Virgen María como una esclaera que nos conduce al cielo, esta metáfora fue toda una discusión que tuvo lugar en 1477 en algún lugar de Europa.

No dudo que, teniendo la referencia de esa metáfora y que la Vírgen es el vínculo que, en este caso se materializa en algo tangible para hacer llegar esa alma al cielo, haya sido más bien el motivo por el cual se le nombró de esa manera, pero, igual podemos considerar que en algún momento la pintura estaba en alguna parte de la escalera del convento y de allí que fue adquiriendo el nombre pues la escena que vemos nos remite más bien a una Sagrada Familia.

Encontramos en ese templo que, ha sido remodelado y es bastante sencillo tanto en su exterior como en su interior, una muy interesante lección de teología, más bien de liturgia, pues fue algo escrito hace ya 150 años, cuando los reglamentos, tradiciones y creencias eran muy extrictas. Y leemos que: "Por Rescripto pontificio dado en Roma el 18 de mayo de 1860 consta que Nuestro S. P. Pío IX, de feliz memoria, para hacer accesible a nosotros el incalculable tesoro de gracias e dindulgencias concedidas en favor de los fieles en la Sacosanta Basílica Lateranense de la ciudad de Roma, tuvo a bien, a solicitud del Sr. Cura don Antonio de Parra, agregar a la mencionada Basilica, ete nuestro Santurario de Tarimoro, dedicado a la B. V. María de la Escalera.

Admitiendo y recibiendo a la sociedad y comunicación de todas las gracias e indulgencias, así plenarias o parciales, con las que la S. Iglesia se ha dignado a enriquecerla.

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Sumario de Gracias e Indulgencis que disfruta éste Santuario de Trimoro a N.S.M.B.V. de la Escalera. Todos los fieles de uno y otros sexo que verdaderamente arrepentidos, confesados y habiendo recibido la Sagrada Comunión, le visitaren devotamente desde las vísperas hasta puesto el sol de los días de la Ascencsión de N.S.J., de la Navidad de San Juan Bautista, de los Antos Apóstoles Pedro y Pablo, de San Juan Evangelista, de la dedicación de la Santa Lateranense, que es el día 9 de noviembre, rogando poderosamente por la exltación de N.S.M. Iglesia, extirpación de las herejías y concordia entre los principales cristianos, ganarían indulgencia plenaria y conseguirían remisión de sus pecados. (La escena que vemos es el campo de Tarímbaro a pocas calles del templo de la Escalera).

En los días de los Santos Apóstoles Andrés, Santiago el Mayor, Felipe, Santiago el Menor, Bartolomé, Mateo, Simón, Judas T. y Matías, verdaderamente arrepentidos y confesados, a lo menos orasen como en dicho: ganarán 7 años y otras tantas cuarentenas. Visitándole en cualquier día del Adviento, desde su primer domingo hasta la fiesta de Navidad de N.S. J. y en cualquier día de la Cuaresma, desde el Miércoles de Ceniza hasta el Domingo de Resurrección, verdaderamente arrepentidos, y con propósito al menos de confiarse, orasen como es dicho: ganarán cuatro años y otras tantas cuarentenas. (Lo que vemos es ya en Morelia, el altar mayor del templo de San José.)

En los restantes días del año visitándoles con la ya dichas condiciones: obtendrán cien días de relajación de las penitencias que les afecten, o de otras que debieren.

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Por último, visitandole el Domingo primero de Cuaresma, en el de Palmas, en el Jueves Santo, en el Sábado de semana de Resurrección, en el Martes de las Rogaciones y en el Sábado de vigilia del Espíritu Santo, siquiera con el afecto de penitencia y confesión; orando como es dicho: conseguirán las indulgencias estacionales, que en estos días se consgieun en la Santa Iglesia Lateranense, como si personalmente visitasen a la misma.

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Así la Constitución de N.S.P. Benedicto XIV de 6 de mayo de 1751. Se transcribió en Julio de 1956. (La escena que vemos es la bóveda del templo de San José en Morelia.)

Medio pesado el documento, esa impresión me da, al leer cosas como redención, pecados y, claro es indulgencias, pero, ahora que estamos en Morelia te preguntarás que por qué el brinco de Tarímbaro a Morelia. Pues fácil, si andas en servicio público de transporte sabrás que es solo cosa de salir del templo de la Escalera para tomar la combi a Morelia y te bajas en el templo de San José, así de fácil, de templo en templo...

Ahora vamos por otro templo más solo que no recuerdo el nombre, es el que está atrás del mercado de dulces. Pues bien, en el documento que leímos en Trímbaro resalta la primera palabra para la que necesitamos de un diccionario para entender: Rescripto, del latín rescriptus. Desición del Papa o de un soberano para resolver una consulta o responder a una petición.

Y a un costado del mercado de dulces y frente al templo que no se su nombre nos encontramos este monumento a Tata Vasco, sin lugar a dudas el alma espiritual del siglo XVI en la Nueva España, especialmente en Michoacán y más específicamente en Pátzcuaro y toda la zona ribereña del lago del mismo nombre.

Caminando por el Centro Histórico de Morelia, el cual es Patrimonio de la Humanidad vemos que en todos y cada uno de los faroles aparece don José María Morelos, esto debido a que en Morelia se dicen ser la Cuna Ideológica de la Independencia y ese logotipo se hizo a raíz de los festejos del Bicenteneario -adelantado- que allá se llevó durante 2009 y que titularon Conspiración de 1809.

Ahora estamos frente al Museo, lugar en donde Hidalgo proclamara por primera vez la abolición de la esclavitud, esto el 17 o 18 de Octubre de 1810.

Un templo más, no me preguntes cuál, en Morelia hay muchos y en este econtré un impresionante Santo Entierro. Y como que me sigue rebotando lo de las indulgencias. ¿Qué son las Indulgencias?

Pues frente a ésta señorial casona, cercana a la fuente de "las encueradas", así la conocí, con ese nombre, hace muchos años, me refiero a la fuente de Las Tarascas, consultamos la palabra. Indulgencia: palabra latina que significa perdón, benevolencia, condescendencia. El Código de Derecho canónico define a la indulgencia como "remisión ante Dios de la pena temporal por los pecados, ya perdonados en cuanto ala culpa, que un fiel dispuesto y cumpliendo determinadas condicoines, consigue por mediación de la Iglesia, la cual, como administradora de la redención, distribuye y aplica con autoridad el tesoro de las satisfacciones de Cristo y de los Santos" (canon 992).

Se emboba uno caminando por las calles de Morelia, sus fachadas, todas, tienen algo especial cada una de ellas...

Hace algunos años oí decir que la ciudad más limpia del mundo era Estocolmo, pensé que sería fabuloso vivir allí, solo que, no hay necesidad de irnos tan lejos, las calles de Morelia son impecables, para muestra aquí tenemos esta fotografía.

Los contrafuertes del templo del Carmen nos marcan la hora de dejar Morelia, nos enfilamos a la Central de Autobuses y a ver a que parte de la geografía michoacana nos dirigiremos, a donde vayamos, seguro que habrá una cosa magnífica por ver...