martes, 28 de agosto de 2018

Uno de los "heridos de molino" que sobreviven en el río La Laja, Villagrán, Guanajuato

   Para bien (o para mal) contamos en México con una cantidad tan grande de vestigios históricos que, normalmente, pasan desapercibidos y, cuando los notamos, están ya dañados y comienza el rosario de preguntas que incluyen quejas y lamentos de por qué no se hace nada. La respuesta es una, fácil, sencilla y difícil de aceptar: no hay recursos económicos suficientes para rescatar toda esa enorme riqueza material que heredamos, sea en las cosas prehispánicas (arqueología) que en las novohispanas.

   Este vestigio que apenas "descubrí", ha estado ahí desde hace unos 350 años, más o menos. Se trata de un herido de agua, término de las antiguas referencias que en el lenguaje casi medieval nos llegó a México dentro del enorme "paquete" cultural que se unió y mimetizó al conocimiento ancestral de los antiguos mexicanos. Ene este caso nos referimos al manejo del agua.

 "Herido de molino" (desvío del afluente de un río para mover maquinaria de un molino de granos). "... los españoles también medían de acuerdo con la actividad desempeñada, así un "herido de molino" era el agua necesaria para hacer funcionar la rueda hidráulica..." (1). Y si herido era un término para el manejo del agua, que nos parece curioso, veamos los otros que había, igual de curiosos:

  Así, pues, este vestigio que, como te comentaba, apenas "descubrí", a pesar de que por ahí he pasado en varias ocasiones, reafirma aquello de que tenemos las cosas frente a nosotros y no las vemos. 

   Se localiza sobre el río La Laja, en Villagrán, Guanajuato, casi en el límite con el municipio de Cortazar. Esta era una propiedad de la acaudalada familia De la Cruz Sarabia, que tuvieron enormes propiedades, podría decir que eran, en el siglo XVII, los propietarios de las tierras que conforman ambos municipios y justo este "herido" cae en lo que fue la hacienda preferida de uno de los Cruz Sarabia, don Manuel, se llamaba "Sotelillos".

   La zona donde se ubica es de contaminación extrema, como lo podemos apreciar en las imágenes, esto debido a la cantidad de tóxicos que el río va recibiendo en las descargas industriales de Comonfort, y Celaya. A esto aunamos que en la ribera sur hay varias ladrilleras.

  Independientemente del rescate de este vestigio hidráulico de gran valía, tenemos pendiente el rescate de la historia de la familia De la Cruz Sarabia, que fueron de suma importancia en toda la región central del estado de Guanajuato.




Fuente:

Florescano, Enrique. Coord. Mestizajes tecnológicos y cambios culturales en México. CIESAS. México, 2004. p.103

2 comentarios:

  1. Excelentes imágenes! pero el paisaje si que deja mucho que pensar. Saludos, Benjamín!

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  2. Exelente, siempre hay algo que aprender

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