Hoy abrimos otro tema, del cual medianamente habíamos hecho ya mención, no con el nombre que le corresponde que es el de la Imaginería, sino haciendo referencia a los símbolos y a los atributos que las imágenes religiosas tiene. La primera vez que oí la palabra me causó confusión, luego la entendí. Wikipedia la define así: "La imaginería es una especialidad del arte de la escultura, dedicada a la representación plástica de temas religiosos, por lo común realista y con finalidad devocional, litúrgica, procesional o catequética. Se vincula a la Religión Católica debido al carácter icónico de la misma, por lo que la encontramos especialmente en países de cultura católica: España, Italia, Portugal, e Iberoamérica y en menor medida Francia, Canadá, Países Bajos y Austria. Así como también en Filipinas".
Se dice que hubo un gran desarrollo en la Imaginería en los países que ostentaban mayor apego a la religión Católica: España, Italia y Portugal. Consecuentemente llegaron al nuevo mundo esas expresiones, en México y en Perú se arraigaron fuertemente. Hay una escuela Cusqueña, aunque más bien es de pintura, como quiera la Imaginería se permea de ella. De la escuela Novohispana seguramente que podemos decir que la hubo también. Lo que hoy nos ocupa de la Imaginería Mexicana son las representaciones en donde los niños aparecen.
Hace tiempo había publicado algo de la Imaginería, pero más bien la simbólica, en donde aparecen los animales, ese artículo lo titulé: La fauna en los altares. Hubo otro en donde aparecen solamente los perros, y el artículo lleva por nombre Dominis Canis: Los perros de Dios.
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