jueves, 14 de junio de 2018

De Los Altos y sus naranjos en las calles

     Ahora que (supongo) valoramos más la armonía entre la naturaleza y las zonas urbanas, notar que hay aun poblaciones en México donde se han respetado los árboles en la calle, da gusto pasar por su sombra y más aun sentir el aroma de sus azahares. No sé si la disposición de sembrar naranjos agrios vino de Guadalajara (nuevamente lo supongo) pues allá, al menos en las plazas que circundan a la Catedral se mantienen y quedan por ahí algunos escritos que dan cuenta de que agradable era pasar las tardes de jueves y domingo, especialmente cuando los azahares estaban en pleno. Hay información que dice de que en Guadalajara fue a mediados del siglo XIX cuando se comenzaron a plantar los naranjos, es por eso que pienso que fue de allá que se dispuso que por algunos (no sé si en todos) los pueblos del estado se sembraran justo este tipo de árboles. En Los Altos he visto que sí se mantienen, como es el caso de Teocaltiche, como lo podemos comprobar en las siguientes imágenes.













No hay comentarios:

Publicar un comentario