El museo más nuevo que hay en México es el que se abrió en noviembre de 2012 en Cancún. Es considerado como el tercero más importante de todo el país, luego del Nacional de Antropología y el del Templo Mayor. La importancia estriba en el tipo de piezas que se exhiben. Las que se muestran en Cancún son una depurada selección de lo mejor que hay en la zona maya mexicana de los estados de Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Y algo excepcional que hay allí es el justo equilibro entre naturaleza, arte y cultura. Me explico.
La natualeza en esa región de Quintana Roo es exuberante, si bien se ha talado mucho con el crecimiento de la zona hotelera de Cancún -y ni que decir de la zona urbana- las partes que se han podido conservar, son excepcionales, como es el caso de San Miguelito, en donde se levanta el Museo y que, además, se integran los vestigios de construcciones mayas, dicen que del siglo IX aproximadamente. Agreguemos a esto una interesante obra de Jan Hendrix, el holandés asentado en México, que se ubica en la explanada de acceso al Museo. El edificio fue creado por Alberto García Lascurain. Una interesante descripción del recinto la puedes leer aquí. Así pues, si planeas ir de vacaciones a Cancún, recuerda que no todo en la vida es playa y antros, hay lugares excepcionales también, como lo es el Museo Maya de Cancún. Aquí una ligera muestra.
Y tú Benjamín ¿qué dices?, disculpa lo directo de mi cuestionamiento pero de verdad me interesa saber qué opinas sobre este museo. Espero llegar a conocerlo este mismo año. Gracias y saludos.
ResponderEliminarYo digo, Frank, que para que disfrutes tu visita a este espectacular sitio, no vayas en domingo, que es libre y hay mucha gente. Este ha sido el museo con más visitantes que he visto. Cosa no agradable pues todos andan en pos de la foto para "subirla" y dejar constancia que andan por Cancún. No te digo de los niños que corren, que no te dejan leer o que se atraviesan cuando estás descubriendo un detalle en las extraordinarias piezas que allí se muestran. Ve temprano, cuando hay poco afluencia, el sitio es hermoso, el edificio es moderno pero con inteligencia se une lo natural con lo que construye el hombre. Hay que ir despacio, pues las piezas que allí se muestran son de lo mejor. Luego hay que salir a la parte arbolada, lo que queda se selva en Cancún, ver cada árbol, cada planta muy bien puesta (la jardinería es estupenda)y llevarte la sorpresa de que a unos metros de donde esta el segundo tiempo compartido que se construyó en Cancún sobreviven los vestigios de unos adoratorios mayas. Bien vale sacrificar una mañana de playa, para visitar este museo.
EliminarGracias Benjamín. Saludos y felicitaciones otra vez por El Bable.
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