lunes, 1 de enero de 2018

Dándole identidad a los barrios de Salamanca, Guanajuato

   Comenzamos el 2018 con algo por demás positivo que acabo de ver por las calles de Salamanca, algo que me motiva pues al platicar con el artista urbano que ejecutaba la obra me dijo la razón que tenían de hacerlo. Me dice algo que es la parte positiva del barrio, esa parte que va mucho más allá del temor que de pronto siembran ciertas bandas "banditas" que se forman de adolescentes y que acaban mal, sea en las drogas, que en los robos o en una vida sin ton ni son, que es peor aun que la del "nini". Me explico.

   Justo un día como hoy, hace 414 años fue fundada la Villa de Salamanca, en 1603. Para 1895 la Villa es elevada a categoría de Ciudad. Durante el tiempo de formación, Salamanca, como cualquier otra población novohispana, al crecer, fue dividida en cuatro sectores, llamados cuarteles. Los ejes corrían perfectamente orientados, de norte a sur y de oriente a poniente, este último, lo marcaba el Camino Real. La población creció y hubo la necesidad de crear más cuarteles, 5 o 6. En ellos se incluían algunos barrios o pueblos de indios.

   Al finalizar el siglo XIX, la población era aun más grande, seguían las divisiones de cuarteles pero las zonas eran mejor conocidas por los nombres de sus barrios, así en Salamanca estaban los barrios de San Pedro, San Roque, San Antonio, Nativitas y el Barrio Alto. Tanto San Pedro como Nativitas fueron pueblos de indios pero, ya para entonces el concepto de pueblo estaba olvidado pues se habían integrados a lo que hoy llamamos "mancha urbana". Y es justo hoy que el Barrio Alto hace una propuesta por demás interesante: darle arraigo e identidad a su barrio.

   Y lo están haciendo con algo que sobrepasa el concepto del grafiti (o en todo caso de ahí surge) para ir más arriba y mostrarse como verdadero arte urbano, con la idea de que los otros barrios busquen su identidad y la muy grafiteada ciudad que se muestra sucia y descuidada, surja cual ave fénix y muestre su mejor cara. Con manifestaciones que tengan sentido y den un sentido a las cosas, dejar de rayar paredes y ensuciarlas, para mostrar arte, concepto y, sobre todo identidad.

   Mejor manera no tenemos para iniciar el año, esperemos que el ejemplo cunda por toda la población...











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