domingo, 11 de septiembre de 2016

De las muchas Repúblicas que hubo en el México del XIX

  Siempre he pensado que el mapa del territorio nacional es bello. Estando en la escuela primaria una de las cosas que más disfrutaba eran las lecciones de Geografía, delineaba los  contornos de cada estado, marcaba sus ríos, definía sus montañas. Veía algo muy estético en eso que es el diseño que la naturaleza creó y que se le dio el nombre de México. Pero, al ver el mapa de cuando era el Virreinato de la Nueva España la estética me cambiaba, lo veía como muy "cabezón" y no me agradaba. Ahora que analizo un poco más lo que fue en términos territoriales el país topo con algunos episodios ocurridos al mediar el siglo XIX, cuando, por el norte y por el sur, la República Federal se comenzó a desmoronar. Desmoronamientos breves o no muy prolongados que bien vale la pena conocer. La imagen que verás ca continuación es la bandera sugerida para la República de Chiapas, república que nunca se promulgó, por cierto.

  República de la Sierra Madre era el nombre que hipotéticamente asumirían los estados mexicanos de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas al momento de independizarse por segunda ocasión de México y formar un nuevo país, tal como lo hicieron en 1840 con la República del Río Grande. Descontentos por la política centralista mexicana que aun imperaba; luego de haber derrocado al veracruzano Santa Anna. Ahora ese papel era tomado por las nuevas presidencias subsecuentes llegando al clímax del enfrentamiento con Comonfort y luego con Juárez. El término aparece en la correspondencia de algunos políticos del siglo XIX y entre sus promotores se señalaban al gobernador del entonces Estado de Nuevo León y Coahuila, Santiago Vidaurri y al gobernador de Tamaulipas, Francisco Vital Fernández. Vidaurri en el artículo número 50 de su Plan de Monterrey (el cual convocaba a los estados de Nuevo León y Coahuila y Tamaulipas a luchar contra el despotismo).

  La República del Río Grande ó La frontera del norte de la república Mexicana fue un intento de formar un país, compuesto por los estados mexicanos de Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y partes del estado estadounidense de Texas, entre el 17 de enero de 1840 hasta el 6 de noviembre de 1840 debido al descontento popular en la región por régimen basado en las Siete Leyes, ejercido durante el gobierno de Anastasio Bustamante, el cual favorecía un sistema de gobierno centralista. La República del Río Grande se pretendió fundar en Norteamérica entre las fronteras de la República de Texas y la República Mexicana. La imagen corresponde a la bandera de la República del Río Grande.

 La denominada República de Yucatán, que de hecho nunca fue constituida como tal, fue una entidad de mediados del siglo XIX que abarcó los actuales estados mexicanos de Campeche, Quintana Roo y Yucatán (la integridad de la porción mexicana de la península de Yucatán), los que en tiempos de la dominación española habían constituido gran parte de la Capitanía General de Yucatán. Yucatán se unió a la federación mexicana como república federada de Yucatán1 el 29 de mayo de 1823, sin embargo, fue hasta el 23 de diciembre de 1823 cuando se le admitió como estado de la federación. Se independizó en 1841 naciendo así la denominada segunda "República de Yucatán" y se reintegró definitivamente a la nación en 1848. En la imagen la bandera de la República de Yucatán.

 En su historia, el estado mexicano de Tabasco, ha proclamado su separación del país en tres ocasiones, todas durante el convulsionado siglo XIX. La primera ocasión en que se proclamó la separación de Tabasco de México, ocurrió en 1841, después de una guerra civil ocurrida en el estado y que inició en noviembre de 1839 en protesta por la desaparición de la república federal y la instauración del régimen centralista en el país. En esa ocasión, el Congreso tabasqueño decretó la separación del estado, proclamó la creación de la República de Tabasco, y nombró como presidente a José Víctor Jiménez Falcón. Vemos en la imagen la bandera de la República de Baja California.

   La Expedición Filibustera de William Walker a Baja California y Sonora ocurrió en el año de 1853, después de un intento fallido del propio Walker de invadir Sonora desde la frontera de Arizona. William Walker ambicionaba apropiarse de Sonora, y en sus pretensiones contó con el apoyo de magnates y la complacencia del gobierno de Estados Unidos. En noviembre de 1853 se embarcó con doscientos hombres hacia La Paz, donde pudo capturar al jefe político y proclamó la independencia de la República de Baja California, un estado que nunca tuvo reconocimiento ni tampoco existió en los hechos, pues Walker jamás tuvo el control total de la península ni contó con el apoyo de la población. Más bien, enfrentó la resistencia del ejército y los civiles mexicanos, entre los cuales destaca el grupo comandado por Antonio Meléndrez. A pesar de hallarse replegado en Ensenada y sufrir el amotinamiento de sus tropas provenientes de Estados Unidos, Walker se proclamó presidente de la República de Sonora, que comprendía también a Baja California y que, al igual que su sucesora, tampoco tuvo existencia de hecho ni reconocimiento alguno. De hecho, Walker sólo alcanzó el territorio de Sonora en 1854 cuando presionado por la marina de Estados Unidos y México debió huir de Ensenada. Ante el acoso de Meléndrez y la deserción de otra parte de sus tropas, Walker y el remanente de su ejército filibuistero se entregó en San Diego al ejército estadounidense. Llevado a juicio, el juez señaló que era culpable de violar la Ley de Neutralidad suscrita entre México y Estados Unidos después de la invasión estadounidense a México en 1847. Sin embargo, Walker fue absuelto por el jurado. La bandera fue la de la Repúlbica integrada de Baja California y Sonora.

  Si todo eso hubiera ocurrido, lo que vemos en café hubiera sido la fea forma que la desintegrada República de México hubiera tenido... sin ton ni son... Nota: los textos en cursiva los tomé de Wikipedia. Te recomiendo entrar a visitarlos si quieres ahondar en el tema.

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