lunes, 13 de noviembre de 2017

¿Quién peca más? la vaca o la pata. Leer en México

   En estos días de Noviembre, siempre pienso en lo mismo: en esa idea absurda, ñoña, y más bien pendeja, que tenemos de que "el Gobierno no hace nada"... me refiero a la cultura y a la lectura. Siempre he pensado que el Gobierno hace mucho y que somos nosotros quienes no hacemos nada. Para muestra traigo en este Día del Libro, el caso de las Lecturas Mexicanas, serie que publicó la SEP junto al FCE, es decir, la Secretaría de Educación Publica y el Fondo de Cultura Económica. Serie que en los ochenta fue una de las tantas maravillas que tuvimos y que, como agua en día de lluvias torrenciales, pasó con toda su abundancia directo al caño. Es decir, a la nada... y conste que no dije "al coño" (pero casi.)

 Vamos aclarando la idea: digo que en estos días de Noviembre porque en México el 12 de Noviembre se recuerda el natalicio de Juana de Asbaje (Sor Juana Inés de la Cruz) como el Día del Libro y se conmemora, vía la Cámara Nacional de la Industria Editorial con la edición de un libro que nos ofrece la antología de algún destacado escritor mexicano, esos libros se regalan, por cierto.

   Ahora bien, lo del dicho que uso de "tanto peca el mata la vaca, como el que detiene la pata" es porque en infinidad de ocasiones he oído el consabido "es que el Gobierno no hace nada" y... Señores, seamos honestos y seamos adultos... el Gobierno en términos de cultura, en términos de lectura, ha hecho mucho y no hemos sido capaces de entenderlo. Aquí un ejemplo.

  A partir de 1982, aparecieron en todos y cada uno de los puestos de periódicos del país una serie de libros llamados Lecturas Mexicanas, cada semana se publicaba un título diferente; costaban -hasta donde buenamente recuerdo- 18 pesos cada ejemplar que, a nuestra moneda actual representaban algo así como 30 o 40 pesos y eran las obras más escogidas y extraordinarias que en México se han publicado de autores primordialmente nacionales o, en todo caso, avecindados en México. El que muchos lectores hayan preferido comprar y leer publicaciones como Alarma, El Libro Vaquero o el Memín (ni que decir que decir de TVnovelas), esa es otra cosa. Creo que en este caso la vaca fue sacrificada en casa y dentro de la casa, pues, si no hay el hábito de la lectura, difícilmente lo habrá en las siguientes generaciones... Y en la década anterior, en los sesenta, y buena parte de los setenta, por tan solo 6 pesos, te llevabas una joya de la literatura en lengua española, con las publicaciones de Salvat. Es decir: seamos honestos, no leemos porque no nos gusta, basta de culpar a la autoridad. Culpemos más bien a "la casa". ¿Exagero?


1 comentario:

  1. Disfruto mucho de las publicaciones del blog ya que me gusta conocer de la vida de los antiguos mexicanos y concuerdo en que no faltan medios,lo que no hay es intencion,ya que me consta que la gente lee pero no lo que mejor le vendria.Un saludo y gracias por tan maravillosas publicaciones.

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