lunes, 27 de julio de 2009

Mi tirada a perder 2009

Soy yo, Benjamín, finalmente me atrevo a poner mi retrato tal cual soy en la Misión de Concá, Querétaro, el 24 de Julio, 2009. Lo que se ve al fondo es algo que me atrevo a denominar Utopía, eso te lo comentaré durante la semana.

He tratado de mantener un orden en los artículos que he ido subiendo, pretendiendo hacer más comprensible mis ideas, creo lo he logrado, por cierto, agradezco grandemente a los conocidos y desconocidos que han tenido a bien dejarme algún comentario, mas aun a quienes se han unido como seguidores. En los avisos semanales que envío, te enteraraste de que durante la semana pasada estaría fuera y no pondría ningún artículo, así fue, me tiré a perder, cosa que me agrada sobremanera, creo que para eso nací. Me tiré a perder esta vez en la Sierra Gorda, no la de Guanajuato, sino la de Querétaro. Hace un par de horas regresé y no puedo resistir la tentación de resumir lo que vi. La intención hoy es comentarte el itinerario, luego, mas adelante te iré detallando al estilo El Bable, cada cosa, cómo, cuándo, dónde y por qué sucedió.

La impresionante Sierra Gorda de Querétaro, Reserva de la Biósfera declarada por la UNESCO, su paisaje es, simplemente, impactante. De no ser por Flecha Amarilla, nunca hubiera conocido esta maravilla.

Montarme en la flecha, no es cosa nueva, para quienes no están familiarizados con el tema, esto quiere decir, subirse al Flecha Amarilla, el servicio público que enlaza todo el Bajío y algo mas, de cabo a rabo. Esta vez lo hice de Salamanca a San Juan del Río, con la intención de transbordar allí y seguir rumbo norte, hacia la Sierra Gorda, lugar que ansiaba conocer desde hacía algunos años, gracias a la estupenda publicación que un día sacó Arqueología Mexicana en donde contaba de la zona, ese día decidí ir a conocer lo que la UNESCO declaró como Patrimonio de la Humanidad, acabo de lograrlo y la verdad, estoy plenamente satisfecho y con todas las expectativas rebasadas.

Hay otros Cadereyta en México, este de la foto es el de Querétaro, ubicado luego de la zona vitivinícola y antes de comenzar la Sierra Gorda, es decir, la Sierra Madre Oriental.

Con esos nombres de poblaciones, no puedo decir que estaba familiarizado, pero si las había oído, Pinal de Amoles, Jalpan de Serra, Landa de Matamoros, Xilitla, por nombre y foto las conocía, ansiaba verlas en persona, pero no tenía la menor idea de lo que me esperaba, un viaje, que ha rebasado totalmente todas mis expectativas, pensé ir por tres días y hasta hoy lunes regresé, luego de 9, la razón es una y definitiva: la zona es maravillosa. Te recomiendo tomes un mapa y ubiques los lugares, se que luego de ver las fotos los anotarás como los próximos a visitar. Bernal y Tequisquiapan son, quizá, bien conocidos para muchos, pero esos lugares son, la verdad sea dicha, para principiantes, lo bueno comienza en Cadereyta, que es algo así como lo más remoto de lo que podría considerarse como Bajío, desde allí los colores cambian, me refiero al de las poblaciones, todo se vuelve de la gama que va del café al naranja, otro color no cabe en el entorno.

Pinal de Amoles se ubica en lo alto de la Sierra, de ahí que su clima sea frío, varios kilómetros antes de llegar lo único que se ve son pinos y mas pinos, no en balde es un pinal.

Unos pocos kilómetros más delante de Cadereyta la Sierra se muestra tal cual es, imponente, impactante, indomable… si tienes problemas de mareo, cuidado, desde allí no encontrarás cien metros rectos, todas son curvas, una tras otra y siempre en ascenso, el panorama se vuelve agreste, casi inhóspito, me recordó mucho ciertas partes de la península de Baja California, pero no, estamos en pleno centro de México… el impacto es grande cuando, luego de una hora de curvas y mas curvas, de pronto el paisaje cambia, se vuelve verde, la temperatura baja, se enfría y llegamos a Pinal de Amoles, todo es tranquilidad, sus techos rojos, contrastan con el verde fuerte del bosque de pinos, apenas hace media hora veíamos lo mas agreste de la Sierra Madre, ahora vemos lo mas espléndido del verde. Las sorpresas de la Sierra Gorda apenas están comenzando.

Las cinco Misiones Franciscanas de la Sierra Gorda merecen ser vistas con detenimiento para lograr entender todo lo que en sus fachadas encierran, no son solo adornos, son simbolismos bien fuertes que representan a las dos culturas que se tratan de mimetizar una en la otra, son el mestizaje en su máxima expresión. Aqui un pequeño detalle de la Misión de Santiago Apóstol en Jalpan.

Pasé la noche en Pinal, por suerte llevaba pijama y el hotel contaba con dos cobertores, de lo contrario no hubiera resistido la noche. Al otro día, media hora más de carretera, siempre en el Flecha y rumbo norte y el clima daba un cambio drástico de 180 grados, el calor en su máximo y la humedad rebasando el 80%, estaba ya en Jalpan de Serra. Allí es donde se entiende el por qué las cinco Misiones Franciscanas de la Sierra Gorda fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad, para los que gustan de la historia, especialmente para quienes viven en la Baja California, visitar, sobre todo, entender lo que aquí pasó, es recomendable para entender lo que allá pasó. Es decir, cuando los Jesuitas fueron expulsados de Baja California, más bien de todo México, sus misiones pasaron a ser administradas por los Franciscanos que estaban apenas terminando lo que habían comenzado en la Sierra Gorda de Querétaro.

La torre de la Misión de San Francisco del Valle de Tilaco destaca por su ingenuidad en los detalles de su portada. Los colores ocre y naranja contrastan fuertemente con el verde de la Sierra.

Los adjetivos, las admiraciones, todo se me acaba, visitar Jalpan, Landa, Tilaco y Tancoyol es una experiencia que no te puedes perder. Es llegar a los lugares más aislados pero que, a diferencia de la Baja California Sur, acá si hay tierra fértil y clima benigno, por consecuencia son lugares en donde el desarrollo de los intentos de esa UTOPIA Franciscana fueron medianamente posibles, de eso, de los Franciscanos y sus Misiones en la Sierra Gorda, de la Utopía de Tomás Moro y de los colores ocres siempre presentes en la Sierra tengo mucho que comentar, lo haré más adelante. Pero la aventura continuaba, llegué, ya no en la Flecha sino en el Vencedor, el que controla la Huasteca Potosina, llegué a otra de mis metas: Xilitla, SLP. Sé que algunos del Yucatán me leen, así que hago la aclaración, Xilitla no se pronuncia al modo maya como “Shilitla”, sino al modo mexicano y se dice “Jilitla”, te lo comento para que no te corrijan como a mí, cada cinco minutos.

Las Pozas y el Castillo de Edward James es la razón de la fama de Xilitla, es un lugar excepcional que debes de verlo para creerlo. Se ubica en la exuberancia máxima de la Huasteca Potosina.

De Xilitla tengo tanto, tanto que platicarte que creo me llevaré una semana en ello, eso será más adelante, por ahora solo te pongo una foto y saca tus conclusiones. Dormí dos noches ahí, la segunda fue una de las mejores que he pasado últimamente, estuve solo, te lo adelanto, lo maravilloso de la noche fue que me tocó una tormenta eléctrica. ¿Tienes idea de lo que eso es en plena Huasteca? La luz se fue, los rayos iluminaron uno tras otro la espesura de la selva, la lluvia refrescó el lugar impresionantemente, el retumbar de los rayos de una parte a la otra de esas montañas no lo puedo catalogar más que como mágico. Y si de magia hablamos, solo te adelanto que de las pocas obras surrealistas tridimensionales que hay en el mundo, una de ellas está en Xilitla. Te daré detalles de hoteles, precios y todo lo demás, en unas semanas más. Ahorita solo me quiero desahogar de todo lo que me rebota en la cabeza.

Villa de Reyes, SLP. Del lugar nunca había oído hablar, llegué por casualidad, me agarró, digámoslo así, la noche y me quedé. Jamás me arrepentiré de haberlo hecho. Se ubica ya muy cerca de los límites con el Estado de Guanajuato.

Me devolví a la Sierra Gorda, pero por rumbo distinto, con la intención de llegar a Concá, otra de las Misiones Franciscanas, está dedicada a San Miguel Arcángel. Fue para mí, solo para mí, pude hacer lo que siempre he querido hacer, arrastrarme por todo el templo para captar los detalles desde los mejores ángulos. Esta vez fue posible, respeto mucho los templos, si hay alguien, me comporto como debe de ser, en este caso, el templo fue solo para mí por una hora, subí, bajé, me tiré de espalda, detallé todo lo que pude. Fueron tres veces las que limpié la memoria de la cámara durante el recorrido, por cierto, la cámara nueva, lo digo, por si ves las fotos mejores, es por mera cortesía de mi estimadísima hermana quien me la regaló. Pensaba lo más recóndito de México era La Purísima, BCS, pero ya veo que no, pues llegué a Arroyo Seco, Qro. solo duré diez minutos, no hubo necesidad de mas, continué a Río Verde, de nueva cuenta en SLP y de allí hasta el sur del estado a un lugar del cual nunca había oído nombrar, Villa de Reyes. Fue una afortunada coincidencia. Fue como volver al siglo XIX, simplemente magnífico.

Todo lo que ves en la foto es la Hacienda de Jaral de Berrios, algo impresionante, las artes decorativas en su máxima expresión, ya lo verás dentro de algunas semanas aquí, en El Bable.

Pero si las maravillas no habían sido suficientes, pues al otro día me esperaba algo más grandioso aun… y no exagero. Ya en el Estado de Guanajuato pude llegar a Jaral de Berrios, la hacienda más rica que hubo en el siglo XVII y XVIII… creo que aun en el XIX Jaral de Berrios destacó. Cuando leas el artículo completo, (en dos semanas), sobre esta hacienda entenderás mejor lo que durante el virreinato se entendía como riqueza. Luego de esto fue recorrer el noroeste de Guanajuato, San Felipe y Ocampo, finalmente entré en Jalisco, por Ojuelos y de allí a Lagos de Moreno y para mi gran suerte, la feria comenzaba ese día. Aprendí más aun de los Cristeros, de los Matachines, del porque la belleza de los/las alteñas es tan celebrado en todo México, es decir… tengo mucho de que platicarte, por ahora solo quiero decirte que estoy de vuelta y con tanto material que de aquí al 2010 seguiremos por las tierras benditas del Bajío y sus alrededores.

Durante el desfile inaugural de la “Agostina”, nombre que se le da a la Feria de Lagos, la muestra de uno de los mejores mestizajes de raza de todo México se da a cada minuto. ¿O no?

Todo este viaje maravilloso de poco más de una semana se destruyó estando en la Central de Autobuses de Irapuato cuando compré mi último boleto, el que me traería de vuelta a Salamanca, bajé del autobús de Lagos y fui con el boletero para comprar el último tramo, le pedí uno a Salamanca Centro, me volteó a ver y me dijo:

Con Insen, ¿verdad?...

Tú que me has leído desde que comencé sabes que no tengo por costumbre poner fotos mías, esta vez abro la nota con una foto mía para preguntarte: ¿tengo cara de INSEN? Como quiera el boleto me salió a mitad de precio.

Por si no ubicas Insen, son las siglas del Instituto Nacional de la Senectud… todavía no acabo de asimilarlo.

3 comentarios:

  1. Benja:

    Que bien que te hayas divertido en La Sierra Gorda de Querétaro. Nos vas a tener que contar lo que comiste. Bienvenido.

    Saludos cordiales,

    Alfredo.

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  2. Benja,

    Tengo mucha pena contigo que mis compañeros los Freseros te insultaron con la pregunta de edad pero el bueno es que recibiste una ganga como un regalo de mi pueblo adoptivo :)

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  3. hola benja encantador y viajero gracias por llevarme a esas tierras , lo del insen, mas bien me encaja, ando pegandole al medio siglo mi amigo, un abrazote, te envidio con evidiade la buena jejejeje ya nos veremos a ver si mis vacaciones me levan al bable
    Eduardo

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