Una serie más de fotos que comparto con el tema que tanto me gusta de los viejo, de ahí que en esta ocasión lo catalogue como "añoso". El caso de Oaxaca lo veo interesante y distinto a lo de las otras ciudades igual de añosas que ella. Aquí, bien lo sabemos, es zona sísmica y hace no mucho ocurrió un sismo intenso. Al caminar por sus calles voy topando con esos edificios que están a punto de colapsar y que, sea por especulación inmobiliaria que por reglamentos de construcción asociados a las ciudades patrimonio, no pueden ser demolidos y sus restauraciones deben ser eso: restauraciones y no remodelaciones.
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