miércoles, 22 de mayo de 2013

Acasico, Jalisco: La cruz atrial condenada a desaparecer.

   Tenemos más que claro que estamos inmersos en un severo problema de falta de agua. La sequía se prolonga, los mantos freáticos siguen bajando, la población en aumento... todo se ha conjugado. Se han buscado soluciones y una de ellas es construir presas para que desde allí el agua sea conducida a los lugares en donde es necesaria. Todo eso es la razón por la cual esta cruz atrial que se encuentra en el pueblo de Acasico, municipio de Mexticacán, Jalisco; de no ser removida de donde se encuentra, en algunos meses más, cuando quede concluida la presa de El Zapotillo, será totalmente inundada.

   Por esta zona norte de los Altos de Jalisco mucho se habla sobre el problema que generará una vez que esté concluida la obra de la presa llamada Zapotillo que se construye en un punto del río Verde que abarca parte de los municipios de Mexticacán, Cañadas de Obregón y Yahuaica. El periódico El Occidental publicó el 31 de enero de 2013: "Hoy el dilema está entre perder esos 3.3 litros por segundo para la ciudad (de Guadalajara) o inundar Temacapulín, Palmarejo y Acasico".

  Pero el abasto de agua no sería solamente para Guadalajara pues el plan de construcción está auspiciado también por el Gobierno de Guanajuato, dado que esta presa daría agua también a León. Los pobladores de las tres comunidades mencionadas se oponen a ser reubicados en otro sitio pues, de sobra está decirlo, sus raíces están en la zona que se convertiría en el vaso de la presa El Zapotillo. Uno de los problemas que allí se darían es la destrucción de algunos edificios coloniales de importancia, especialmente en Temacapulín, lugar en donde pernoctó el virrey Antonio de Mendoza cuando iba rumbo a la región Cazcana, sitio en donde se dio la Guerra del Mixtón.

   Quizá la solución más fácil y sencilla, en el caso de Acasico, es el traslado de su cruz atrial y, tal vez la reconstrucción de su capilla dedicada, tengo entendido, a la Virgen de los Remedios, a un lugar próximo que no sea inundado por la presa pero nos enfrentamos al problema que sale de los más profundos sentimientos en lo que conocemos como arraigo a su lugar de origen.

   No tengo el dato de cuándo habrá sido levantada la capilla, cuya obra original se mantiene gracias a que al reconstruirla se mantuvieron las paredes de lo que fue la primera construcción. Tampoco se de cuándo data la cruz atrial, muy probablemente del siglo XVIII. El caso es que, sigue en la mesa de discusión si la cortina de la presa se levantará 80 o 105 metros de altura. Sea una o la otra, Acasico desaparecerá. Pero, en el caso de Temacapulín, si solo se construyen 80 metros el pueblo se salvaría, pero, si la decisión es de elevarla a 105, entonces también quedaría inundado. 

   Temacapulín no lo conozco, dentro de poco iré a ese lugar. Y esto que ahora ves, en Acasico, ese sí que está ya con pocos meses o pocos años de vida... aunque su cruz es rescatable, los sentimientos de arraigo dicen que ellos, los habitantes del lugar, morirán allí junto a su templo y su cruz.









   Si el tema te interesa, en este enlace podrás leer, en el capítulo tres, más detalles sobre la situación que se vive actualmente en esta región de Jalisco en donde se está construyendo la presa de El Zapotillo..

3 comentarios:

  1. Hermosa cruz atrial, impresionante su tallado y como se han conservado todas las lineas que lo forman, es impresionante hasta donde hemos dañado nuestro medio ambiente tanto que para satisfacer nuestras necesidades básicas tengamos que perder no solo pueblos, sino áreas de tierra; me encanta su blog, saludos.

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  2. Espero que puedas darnos más información, Saludos Rosa ma

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  3. Que interesante historia, si no lo platicas no me entero. Ví una película antigua sobre una situación muy parecida en EU. La gente ama la tierra que pisa y cultiva.

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