sábado, 12 de septiembre de 2009

Un reconfortante recorrido por Landa de Matamoros, Qro.

Quizá en el artículo anterior fueron muchos los términos arquitectónicos pero, insisto, es la manera de irnos adentrando al mundo de la apreciación artística, cuando logramos definir cada cosa, así como, en ocasiones es complicado entender al Médico, debemos tener un diccionario de especialidades, igual en la arquitectura y como en El Bable nos dedicamos a pueblear, pues que mejor que irle dando forma al lenguaje técnico. Adentrémonos ahora en el Pueblo de Landa de Matamoros, Qro. En la foto la Misión Franciscana de la Purísima Concepción con el majestuoso fondo de la Sierra Gorda.

El punto central del pueblo es, sin lugar a dudas la Misión, la cual está ligeramente un poco mas alto que el resto de la población desde allí se domina todo el valle que circunda a Landa y al fondo vemos imponente, majestuosa, la Sierra Gorda. Lo que se ve en primer plano es parte del atrio y, como sucede en todos los casos, la misión, que fue en buena medida la avanzada de la penetración española en territorios desconocidos se levantaron con fuertes bardas perimetrales para protegerse de posibles ataques. Existe al centro la cruz atrial de hierro, característica de esta parte de México.

Landa se localiza a menos de una hora de Jalpan, si llevas auto no será ni media hora la que recorrerás. De haberlo sabido, no hubiera pasado la noche en Jalpan en el calor infernal de un hotel de mediana categoría que tuvo a mal alfombrar sus cuartos y no ponerle ventanas exteriores que permitieran la ventilación. En Landa hay una posada, algo así como una casa de huéspedes, bien amplia y limpia ubicada frente al jardín principal que se localiza a un lado de la Misión. En esa misma zona está un restorán y si ves circular cinco autos cada hora, son muchos, así que para quienes gustan de la auténtica tranquilidad aquí está esperándote.

Las calles empedradas muchas de ellas ven hacia los cuatro lados siempre a la Sierra, el clima es más agradable, hace un poco de calor, de ese tolerable y la constante es el silencio, si gustas de caminar, aquí tienes espacio suficiente, a cada metro te toparás con una vista impactante. Recorrí casi todo el pueblo pero la Misión me dejó con la curiosidad de volver a apreciarla con detalle, me senté un buen rato en la plataforma de la cruz atrial a adentrarme más y más en los detalles de la fachada. No te pongo mas fotos de la Misión pues ayer creo fueron suficientes, aunque, te digo una cosa, nunca será suficiente pues cada ángulo encierra algo. ¿Notaste el detalle de los angelitos en la fachada y en las columnas interiores?

Es recomendable que cuando andes por estos rumbos lleves siempre suficientes monedas y billetes de baja denominación. Estamos muy acostumbrados a cargar de 200 y 500 cuando viajamos, pero, hay que ser realistas y aunque estamos en el mismo país el valor del dinero es un poco distinto, es decir, los precios y las facilidades son distintos. Eso te ayudará a no tener que esperar por el cambio. El desayuno me costó 35 pesos y la sorpresa fue que además del cesto con las tortillas, de esas gordas de nixtamal, viene el platito de los aguacates, de los de cáscara delgada, los tres para ti, pues si algo abunda es el aguacate. Ojo, recuerda que fui a la Sierra Gorda en pleno calor de julio, no se como será el resto del año.

Una de las cosas que más gocé es estar solo durante más de una hora dentro del templo, me pude tirar al suelo para fotografiar y admirar los altorrelieves que muestran distintas escenas de dominación de San Miguel Arcángel sobre el demonio. Dentro de poco será su día, el 29 de Septiembre, entonces te contaré mas sobre éste que a mi gusto es, luego del Sagrado Corazón, la imagen que mas me ha impactado de toda la iconografía católica. Cuando hay gente en los templos nunca me tiro al suelo, me comporto limitadamente pues respeto la fe que cada quién tiene, una vez en Puebla me dieron un periodicazo, otra el Cura me amonestó porque decía que lo distraía mucho, así que aprendí la lección y no vuelvo a distraer a nadie.

Si eres atlético, te gusta la aventura y eso que le dicen ahora la adrenalina, por esa zona tendrás mucho que hacer, pero como fuera de caminar y caminar y caminar y dañarme los pies como fue el caso, no hago otro tipo de ejercicio, no te podría decir las maravillas que por foto y folleto solo vi, pero ganas no me faltaron de adentrarme a la Sierra, no digo que algún día será, pues cuando tenga la fortuna de volver a la Sierra Gorda de Querétaro me iré a sentar, una vez mas en las bases de las cruces atriales para admirar a profundidad las fachadas que por algo se ganaron el título de Patrimonio de la Humanidad.

La maravilla de la Sierra está por todos lados, el paisaje se integra, tierra, rocas, plantas, flores, el cielo, las nubes, todo en perfecta armonía generando un estado de paz y tranquilidad que, bueno, para que te cuento mas, te dejo las fotos…








El pueblo, que es cabecera municipal, se llama Landa de Matamoros, no es Landa debido al apellido común en algunas partes de Querétaro y Guanajuato, sino que viene de la voz chichimeca Lan-ha “lugar cenagoso”. Dato curioso, Ha en maya significa agua, y aquí en chichimeca hace referencia al agua también, y el nombre Matamoros lo adquiere dado que ese héroe desconocido de la Guerra de Independecia, Mariano Matamoros, vivió unos meses, de 1807 a 1808 aquí. Más datos curiosos en nombre de Matamoros es usado en otras poblaciones: Izúcar de Matamoros, Pue. Matamoros, Tamps. Matamoros, Coah. y Matamoros, Chih. El cura, pues también fue cura, nunca estuvo en el norte, se unió a la causa y fue el segundo de Morelos, en la actualidad sus restos descansan en la Columna de la Independencia y se emitió una moneda conmemorativa con su busto, como la que ves en la fotografía que me hizo llegar Diego Campos desde el Estado de México.

Llevamos ya una semana en la Sierra Gorda de Querétaro y apenas vamos a la mitad. Te contaba de algunas dificultades para moverse, aquí la tienes. De Landa hay peseros que van a una población llamada La Lagunita, de allí sale la carretera estatal, pavimentada, que llega a Tilaco, no hay transporte, solo taxi, si tienes la suerte de que te den aventón, como fue mi caso, te ahorras una buena cantidad pues son 15 kilómetros en donde te adentras a la sierra, y nuevamente al calor, a la paz y a la tranquilidad de los pequeños poblados serranos.

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