"Iten, ordeno y mando, que todos los pueblos de estas dichas provincias, y naturales de ellos hagan buenas iglesias en sus pueblos, de adobes é de piedra y bien labradas, y aderezadas, como conviene al culto divino; y esto mando que se haga dentro de dos años primeros siguientes, y mando que todos de mancomun hagan las dichas iglesias, y ninguno se escuse. Y asi mismo mando, que en ningun pueblo haya mas de una iglesia, donde todos concurran, porque asi conviene á la paz y comodidad de los naturales. Y ningun cacique, ni principal, ni alguacil, ni otra persona alguna sea osado por su autoridad á levantar, ni hacer iglesia, ni oratorio ó hermita. Y si alguna hay hecha, que luego se derribe, y ninguno sea osado á lo contrario, pena de cien azotes. Y no haya mas de una iglesia principal, donde todos concurran las cuales dichas iglesias mando sean muy bien adornadas, y siempre estén limpias, y bien cerradas, de manera, que no puedan llegar ningunas bestias á ellas, y todas tengan sus puertas y llaves, y que ninguno sea osado de dormir en ellas, ni de meter cosa alguna, so pena, &c." En nombre del Rey, Tomás López, Oidor de la Audiencia de Guatemala, 1552". (Diego López de Cogolludo, Historia de Yucatán, libro 4, capítulo 17) (Tomado de Moines.mayas.free)
Siguiendo en este viaje virtual por Yucatán, seguimos en Chan Cenote, población que tiene la categoría, de acuerdo a la nomenclatura yucateca, de Comisaría. La cosa que sorprende, luego de las muchas puertas azules es la dimensión de su plaza, cosa que ocurre en todos los pueblos que tienen su origen prehispánico y que luego de la Conquista, fueron congregados haciendo la traza de la población al modo hispano. La dimensión del equivalente a la plaza mayor en cada pueblo es considerable. De todo lo que he visto por distintos rumbos de México cualquiera de estas plazas, en cuanto a su dimensión, solo son equiparables con la de Tepeaca, que está considerada como la más grande en nuestro país. Con el lugar, siempre prominente de su Iglesia.
En el caso de Chan Cenote se trata de un convento, ya en ruinas, de la orden franciscana que fue la encargada de la evangelización de la península. "Esta iglesia es extremadamente sencilla, contó con camerín de la virgen, actualmente en ruinas. La nave de la iglesia corresponde a la segunda mitad del siglo XVIII, en 1874 la nave de paredes dobles estaba techada de guano a dos aguas. Cuenta con una torre de dos cuerpos en ruinas, la otra no existe". (Tomado de 15Mot15de82.pdf. )
Para la segunda mitad del siglo XVI el dominio de los franciscanos era contundente. Contaban con 24 guardianías, en las que administraban desde sus cabeceras a 180 pueblos de visita. En contraste, sólo existían 17 clérigos seglares situados principalmente en Mérida, Campeche, Valladolid, Salamanca de Bacalar y Sotuta; y regían espiritualmente a la población española de 40 pueblos. Sin embargo, la corona, en 1596, solicitó que se secularizaran 8 de las 24 guardianías. Así, en 1602, se agregaron a los seculares las parroquias de Sotuta, Chan Cenote y las guardianías de Ichmul, Hocabá y Tixkokob. Años después, en 1680, se secularizaron Umán, Hunucmá, Homún, Tecoh, Mama, Tizimín, Calotmul, Champotón y Hecelchakán. (Boletín AGN. No.1, 2019, p.1)
"En 1576 se funda el Convento de San Francisco de Chancenote, y en 1579 los frailes franciscanos se hicieron cargo de la administración de San Francisco de Chancenote. En 1582 la administración fue devuelta al clero secular. Su Iglesia dedicada a San Román se edifica hasta mediados del siglo XVIII." (Álbumes de Tizimín.)
No hay comentarios:
Publicar un comentario