¡Idolatría! fue lo que gritaron los frailes españoles cuando entraron en la Gran Tenochtitlán y vieron los templos, luego ellos desaparecerían las 20 festividades religiosas que los Aztecas tenían e impondrían las 137 que denominadas como "fiestas de guardar" se realizaron durante largos tres siglos. La Piedra del Sol, por fortuna, dadas sus dimensiones, no fue masacrada y pulverizada, durante mucho tiempo estuvo enterrada en la esquina nor-poniente del Zócalo, luego fue rescatada, en 1791, y colocada en la parte baja de la torre poniente de la catedral. En este acercamiento a la extraordinaria fotografía de W.H: Jackson tomada aproximadamente en 1885 lo podemos notar claramente.viernes, 14 de octubre de 2011
Antes y ahora: La pared poniente de la Catedral de México.
¡Idolatría! fue lo que gritaron los frailes españoles cuando entraron en la Gran Tenochtitlán y vieron los templos, luego ellos desaparecerían las 20 festividades religiosas que los Aztecas tenían e impondrían las 137 que denominadas como "fiestas de guardar" se realizaron durante largos tres siglos. La Piedra del Sol, por fortuna, dadas sus dimensiones, no fue masacrada y pulverizada, durante mucho tiempo estuvo enterrada en la esquina nor-poniente del Zócalo, luego fue rescatada, en 1791, y colocada en la parte baja de la torre poniente de la catedral. En este acercamiento a la extraordinaria fotografía de W.H: Jackson tomada aproximadamente en 1885 lo podemos notar claramente.
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muy interesante!
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