Mineral de La Luz, un pueblo fantasma que quiere dejar de serlo.

Se antoja increíble pensar que en este sitio, hace siglo y medio la riqueza fluía en grande pues sus minas producían de tal manera que, hubo la necesidad de traer más y más gente a trabajar. La minería fue la razón de la fundación de Guanajuato, pero no sólo fue allí, en la periferia de la ciudad se encontraron metales. Son muchos los vestigios que encontramos en la ciudad, tanto en minas: La Valenciana, Rayas, Mellado o Cata, solo por mencionar algunos, como de las Haciendas de Beneficio que allí se instalaron. Una de las acciones negativas durante la guerra de Independencia fue el ataque a las minas las cuales eran inundadas y su riqueza se volvía inexplotable. Luego de la consumación de la Independencia hubo la necesidad de abrirse a los inversionistas extranjeros para hacer nuevamente productivas las minas, es decir, luego de once años de larga y cruel lucha, se logro expulsar a los españoles y, en el segundo cuarto del siglo XIX, se daba la bienvenida a los inversionistas mineros ingleses, vendrían luego los norteamericanos. Y en la actualidad tenemos a los canadienses... y ya todos en México festejamos el Bicentenario de una pretendida Independencia.

"La recuperación de la actividad minera en Guanajuato, a pesar de los obstáculos que representó el desagüe y de la insuficiente producción de los 25 años que siguieron a la Independencia, conoció un nuevo auge, producto también de la riqueza de sus yacimientos, del trabajo conjunto y de la experiencia minera de accionistas guanajuatenses que se asociaron para emprender otras explotaciones ya no en las viejas minas, sino a partir de nuevas exploraciones hechas en el más antiguo de los fundos mineros: el de San Bernabé, situado en el Sistema de La Luz, al occidente del distrito de Guanajuato.

"En las vetas de La Luz, además de minerales argentíferos como el rociclar (plata roja), se encontró otro nativo en abundancia. A partir de 1790 se desarrollaron importantes trabajos de excavación que fueron interrumpidos, como en los otros minerales, por la insurrección de 1810-1821. En estos años el solo mayorista de La Luz era nada menos que Manuel Antonio de Otero, quien la compartía con Manuel Rubio, propietario de nueve de las 24 barras en que se dividía la mina". (Las barras era algo así como las acciones en que se podía participar en las minas, 24 de ellas representaba el 100%).

"Al arribo del capital inglés en la minería guanajuatense, Otero y Rubio contrataron con la Anglo Mexican Company, Ltd. la mina de La Luz, en 1862. En 1832 esta compañía ya había rescindido su contrato y sus propietarios entraron en sociedad con Juan de Dios Pérez Gálvez. La vida, la experiencia y el interés volvieron a juntar a estos hombres, descendientes de aquellos que emprendieron la extraordinaria aventura que supuso para Guanajuato la empresa de Valenciana.

"Juan de Dios Pérez Gávez financió la compra del socavón de San Bernabé por la cantidad de 61 099 pesos. Este socavón se conectó a la mina de La Luz por medio de un pozo llamado San Mateo y pasó a formar parte de las pertenencias de la nueva asociación. En 1838 Marcelino Rocha, rico guanajuatense que se distinguió, entre otras cosas, por haber resuelto en la capital del estado el grave problema del agua potable, se integró a la sociedad financiando los trabajos de perforación.

"La obra del tiro principal, difícil y costosa, requirió de mayores inversiones de capital. En 1842 Pérez Gálvez financió por segunda vez los trabajos de la mina y se convirtió en el socio más importante y mejor beneficiado de los partícipes o parcioneros. El importe de esta segunda inversión fue de 15 321 pesos, y para colocarlos, Pérez Gálvez se apoyó en los diagnósticos que pidió el ingeniero Ignacio Alcocer, a quien se debe la conexión directa, a través del tiro principal, con un filón de riqueza significativa hacia 1843.

"Esta bonanza produjo la cantidad de cuarenta millones de pesos entre 1843 y 1856, y permitió a la sociedad pagar el importe de los préstamos a Pérez Gálvez que sumaban un total de 76 420 pesos, percibir ganancias lucrativas y contar con capital suficiente para, con sus propios recursos, aventurarse en 1846 a la apertura de un nuevo tiro bautizado con el nombre de San Juan de Dios que cortó la veta en otra increíble bonanza.

"Para amparar la continuación de este filón fue necesario denunciar nuevos fundos hacia el sur, en dirección de la veta. Así se formaron las minas de San José de los Muchachos, colindante a La Luz, y Santa Clara, El Refugio, Jesús María, La Trinidad, Villariño, Providencia, Sangre de Cristo, Mexiamora y otras. En la mina de San José de los Muchachos, en tan sólo tres años, se abrieron los tiros de Santa Lucía, Arcángeles y San Miguel. Este último incidió en la veta, encontrándose mineral con elevadas leyes de oro.

"En enero de 1846 este mineral se segregó de la capital del estado, erigiéndose como cabecera de municipio, con una población de 24 000 habitantes, muchos de los cuales eran trabajadores que venían de las minas de Guanajuato. El municipio de La Luz había resuelto su propio abastecimiento creando una red comercial con la villa de Silao y la ciudad de León y activando la circulación de monedas en toda la comarca. La década de los sesenta marcó una etapa de decadencia general en el distrito minero de Guanajuato, incuyendo al mineral de La Luz. Factores internos y externos a los que estaba sujeta la actividad minera se confabularon en esos años afectando a hombres, bestias, costos de producción e infraestructura, al grado de producir un marcado desequilibrio general tanto en los distritos mineros como el área rural.

"Al inicio de ésta década la población se encontraba diezmada a causa de las epidemias de escarlatina, viruela y tifoidea que entre 1856 y 1861 habían azotado la región. Acompañaba a estos dramáticos sucesos otro no menos funesto: el hambre provocada por una escasez de granos y forrajes, consecuencia de malos años de cosecha, culminando en 1863-1864 con una terrible sequía. Las consecuencia no tardaron en presentarse: la carestía provocó un alza considerable en los precios de los abastecimientos y en los costos de producción. Se registró una fuerte pérdida de mano de obra por la muerte y la migración de miles de hombres.

"También repercutieron sensiblemente en la actividad e infraestructura de las minas las inundaciones de los años 1867 y 1873 y un fenómeno natural muy particular e inexplicable, manifiestado por espantosos ruidos subterráneos en los años de 1859 y 1874 acaecidos en la ciudad de Guanajuato y en las sierras adyacentes. Estos ruidos ocasionaron la suspensión de las labores mineras extractivas debido a la reticencia de los operarios que, perturbados, se negaron a bajar a las minas. Tales calamidades produjeron una difícil y desigual situación entre las empresas extractivas y las de beneficio, llegando muchas de ellas a suspender sus actividades.

"Por otro lado, las pugnas entre liberales y conservadores, la llegada a México del emperador Maximiliano de Austria y el éxodo de Benito Juárez de la capital de la República, provocaron gran confusión en la economía del país. Los capitales y presupuestos se dirigieron a costear los gastos requeridos por uno y otros bandos. La escasez de inversiones en la minería entre 1864 y 1872 fue palpable". (1)

Pero la debacle apenas se estaba iniciando en el Mineral de La Luz, los ingleses no continuaron con la operación, vendrían entonces los norteamericanos. "La Luz Mining and Milling Co., se estableció en 1887 cerca del socavón de San Bernabé, pero no tuvo éxito, al grado que hubo que vender sus maquinarias al Mineral de Catorce, San Luis Potosí". (2) Vendrían luego los convulsionados años previos a la Revolución, la propia Revolución y, finalmente, el movimiento Cristero que también afectó, dada la cercanía del mineral con la montaña de el Cubilete. Y por último, el decreto de 1929:

"El ciudadano Agustín Arroyo Ch., Gobernador Constitucional del Estado Libre y Soberano de Guanajuato, a los habitantes del mismo, sabed: Que la H. XXXII Legislatura Constitucional del Estado se ha servido dirigirme el siguiente Decreto: Número 4. Artículo Primero: Se suprime el Municipio de La Luz, que se incorpora al de Guanajuato. Artículo Segundo: Se suprime igualmente el Municipio de Pozos, que pasará a formar parte del de San Luis de la Paz. Artículo Tercero: El Municipio que hasta la fecha lleva el nombre de Itrubide, se denominará en lo sucesivo como el de Álvaro Obregón. Artículo Cuarto: Este decreto comenzará a surtir sus efectos a partir del primero de enero de mil novecientos veintinueve". (3)

El pueblo de La Luz en la actualidad tendrá unas diez calles de norte a sur y unas siete de oriente a poniente, caminando con rumbo sur salí del pueblo para econtrar algunos vestigios de las que fueran prósperas minas y haciendas de beneficio.

Y ni que decir de esta marcada huella no de la minería de finales del siglo XIX, cuando los norteamericanos se asentaron en el lugar, sino de esta influencia que hay de los llamados "paisanos", los que antes eran conocidos como "braceros", "pollos" o "mojados", que cuando regresan de sus arduas y largas estancias de trabajo del "gabacho", como le dicen a los Estados Unidos, regesan en su camaro o en su "troca" y, uno que otro, con la influencia suficiente de nacionalismo que se trajeron de allá...

Esta es una bocamina, la cual está cancelada, para ello usaron, lo notarás, los rieles de los carritos en los que transportaban el material aun adherido a la roca... cosa que no recuerdo haber visto en Pozos, en donde debes de caminar con mucho cuidado pues no todas las bocaminas están marcadas, mucho menos protegidas.

En este sitio específicamente, el contiguo a Mineral de La Luz trabaja la empresa mexicana Peñoles, de las pocas que ví, digo por pocas, mexicanas, pues los letreros que hay a lo largo del camino entre Guanajuato y La Luz son de empresas canadienses, como la Endeavor Silver Corp, la cual,el 13 de diciembre de 2011 anunció que habían encontrado plata.

La toma hecha desde el oriente hacia el centro del pueblo.

Ahora desde el sur...

Este polvo blanco que se ve no es otra cosa que la huella contaminante que hay en todos los pueblos mineros, se llama Jale, es es el jale.

Y, parado en el límite oriente de La Luz, vemos en el horizonte como sobresale la punta de un cerro en forma de cubo, ese es el otro lado de Guanajuato, es donde se ubica el rancho de Los Calderón, creo fue también mina, no estoy seguro, pero seguro estoy que de das una idea de que toda la región que desaparece debajo del horizonte de esta toma es la región minera de Guanajuato.

Fuentes:

1.- Aguilar Zamora, Rosalía y Sánchez de Tagle, Rosa María. De vetas, valles y veredas. La región económica guanajuatense entre 1730-1918. Ediciones La Rana. Guanajuato, 2002.

2.- Jáuregui de Cervantes, Aurora. El Mineral de la Luz, Guanajuato. Universidad de Guanajuato. Guanajuato, 1996.

No se que tanto impacto te causó y que relación encontraste con lo que se describe entre los años 1859 a 1874, pero a mi me da la impresión de que son cosas iguales, muy parecidas, a lo que en la actualidad está sucediendo... por ejemplo, eso de los "extraños sonidos" cosa que va asociada, según la NASA a la explosión solar que hace cosa de 10 días sucedió y, resulta que en 1859, según aquí se anota, hubo esos extraños sonidos en las minas y, casualidad o efecto, ese año hubo también una explosión solar, la puedes ver aquí:

http://vamonosalbable.blogspot.com/2010/05/aurora-borealis-el-cielo-embotellado.html

Para leer algo que pasa en las minas de Guanajuato, entra aquí:

http://revistaminera.wordpress.com/2010/07/21/vetas-de-oro-y-plata-iluminan-las-entranas-de-guanajuato-halladas-en-el-siglo-xvi/

Pozos, el que fuera también municipio minero, ahora pueblo fantasma, es una maravilla, para conocerlo, entra aquí:

http://vamonosalbable.blogspot.mx/2009/06/pozos-el-secreto-mejor-guardado-de.html

Para leer algo más sobre el Jale en las minas, aquí:

http://vamonosalbable.blogspot.mx/2009/03/el-jale.html

...y a estos sonidos me refiero:

http://www.elintransigente.com/notas/2012/3/6/explican-misteriosos-sonidos-cielo-hasta-hacen-saltar-alarmas-autos-124195.asp