Llegué a Cuautinchan luego del mediodía, luego de una mañana fría y nublosa que reforzó el escenario para hacerlo aun más medieval, andaba por el Valle Central de Puebla que está salpicado de Conventos y templos levantados en el siglo XVI, ahora estaba llegando a este sitio, un pueblo más bien pequeño en el que sobresale el gigantesco atrio del ex convento de San Juan Bautista y, sobre todo, la mole que es el templo que los franciscanos levantaron.
Es curioso ir descubriendo los sitios que han estado allí, desde hace tanto tiempo, caminar por zonas que se antojan despobladas, pero no lo están, sucede que, cuando hace frío la gente se queda en sus casas, y cuando hace calor, igual pasa, recuerdo, como contraste, haber andado por algunos pueblos de Yucatán y no ver alma alguna por las calles, el calor era intenso y esa la razón por la cual no había gente caminando, lo harían hasta luego de las 5 de la tarde, cuando la intensidad de la temperatura baja un poco.
Acá, por donde ahora me encontraba ocurría exactamente lo contrario, la tarde estaba fría y no había realmente necesidad de salir del auténtico "calor de hogar", por eso fue que casi no vi gente caminando por la plaza de Cuautinchán. El nombre, significa "nido de águilas", fue un sitio de mucha importancia en la conquista pues aquí fue donde los españoles vieron la riqueza de la zona que estaba descubriendo, y desde aquí, dicen, se reforzaron para apoderarse de la gran Tenochtitlán.
La parroquia es "nueva" si comparamos con la fecha en que fue construido el convento franciscano, al entrar en su atrio me sorprende ver que allí se mantiene esa vieja, más bien añeja tradición de los cementerios justo al lado del templo, todas las tumbas viendo hacia el templo, es decir, hacia el norte, dado que en el norte es donde se ubica el altar mayor. Aquí, como en Tecali, a raíz de los ajustes hechos por el obispo Palafox y Mendoza, los franciscanos decidieron abandonar el sitio.
"Cuautinchán fue fundada en el siglo XII y más tarde fue ocupada por diversos grupos indígenas, entre ellos destacan los olmecas xicalancas, los chichimecas y los toltecas, quienes constituyeron un gran señorío nahua. Cuahutinchán formó parte del área estratégica de los españoles para la conquista de la gran Tenochtitlán. Posterior a ella los franciscanos iniciaron la evangelización del lugar y con ello la construcción del convento por el alarife español Francisco Becerra en 1530.
"El convento quedó abandonado por los franciscanos en 1640, resultado de la secularización religiosa, iniciándose la construcción de la parroquia, de cruz latina y una sola nave, decorada con retablos barrocos. La parroquia estuvo en servicio hasta 1973 porque el sismo ocurrido ese año obligó a cerrar sus puertas, las cuales se abrieron de nuevo como museo de arte religioso del pueblo. Hoy en día, la celebración eucarística se realiza nuevamente en el ex-convento de San Juan Bautista".
Veo que aquí, como en los otros pueblos del Valle Central poblano que ya visitamos, está lleno de historia, por ahora sólo vimos su parroquia y cementerio, luego veremos, con calma, el extraordinario Ex convento, otra maravilla, sin lugar a dudas.
Pero... ¿Es Cuautinchan, Cuatinchán, Cuauhtinchán o Cuauhtinchán? Primero aclaremos que hay dos poblaciones con este nombre, una en el Estado de México, la otra en Puebla. El nombre oficial es el que vemos en el arco de entrada, sin hache y con acento; el nombre correcto es con hache y sin acento, es decir Cuauhtinchan.
Fuente:
1.- Garzón Balvena, Elsa, coord. Inventario de los archivos parroquiales de Puebla. ADABI, México, 2006. pp.37-39
Gracias Benjamín, por tus magníficas crónicas de los siempre interesantes lugares que visitas de nuestro querido México. Ojalá puedas invitar a algunos de ellos. Mi correo igsergo@yahoo.com.mx yo también soy un apasionado de México. saludysaludos.
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