El Bable se va, pero no se va...

   Procuraré ser breve y directo. Este Bable está por cumplir siete años, siete años de diaria publicación. A la fecha tengo 4'715,190 visitas, quizá llegue a los 5 millones al finalizar el año que será justo el día del 7° Aniversario, el 31 de diciembre. Pero me estoy temiendo que no... no porque así lo quiera, sino porque las circunstancias me orillan a dejar de publicar. No quiero decir que estoy cancelando El Bable, simplemente que, debido a que fueron cancelados los servicios de línea abierta de Internet en las Bibliotecas Públicas en donde solía conectarme, me veo en la necesidad de no publicar más, insisto, El Bable no está cancelado, simplemente que dejo de publicar diariamente como es (era) mi costumbre.

   Sé que en varias casas de amigos y familiares me puedo conectar libremente, pero eso es incómodo en ocasiones, y en otras yo incomodo a la gente que amablemente me deja pasar largas horas conectado a la red. Por eso he decido dejar de publicar diariamente, por tercera vez digo: no estoy cancelando El Bable, ocurre que, como ya no hay línea pública abierta, ya no tengo la posibilidad de hacerlo, como era mi costumbre, ahora será, tal vez, una vez a la semana, o, quizá dos... no lo puedo asegurar.

   Material tengo mucho en el archivo, hace poco, cuando tuve la oportunidad de recorrer en una noche, la mitad del territorio nacional, fui en taxi de Real de Catorce a Matehuala, de ahí en un autobús a San Luis Potosí para transbordar a otro y llegar (de madrugada) a la ciudad de México para cruzar de la Terminal Norte a la Sur en un trolebús, esperar la primera corrida a Taxco y llegar al lugar para extasiarme media docena de veces (que fueron las visitas que hice) al majestuoso templo de Santa Prisca. Fotos tengo miles.... ya llegará el momento que las pueda compartir. Como lo haré con las de Cuernavaca y algunas de Guanajuato, pues todo eso se está quedando en el tintero.

  Así, pues, como dijera Juan Pablo II en 1999, cuando hizo su cuarta visita a México en una emotiva ceremonia en el Estadio Azteca: "Me voy pero no me voy, me voy pero me quedo..." efectivamente, yo me voy pero sin irme, pues volveré al ciberespacio cuando tengan a bien proporcionar los servicios de acceso libre a Internet en la bibliotecas locales.

  Creo que este es un compromiso NO cumplido...