Para todo aquel que ha visitado Cancún y que cree que ya lo vio todo, encuentro que hay una novedad en lo relacionado a los centros arqueológicos mayas que hay cercanos a esta playa, se trata de Ek Balam. Fue apenas hace cinco años que oí hablar de él por primera vez. Ahora que se presenta la oportunidad nos dirigimos para allá, es cosa de tomar la carretera Cancún-Mérida, sea la libre que la autopista y salir a la altura de Valladolid, con rumbo norte en dirección de Temozón. Un poco más adelante se localiza el sitio arqueológico.
Es domingo, no hay cuota de acceso para los mexicanos, los extranjeros sí deben pagar, creo son 46 pesos. El nombre suena fuerte Ek quiere decir negro, Balam se refiere al jaguar, felino que representa a la tierra. Hay quien dice que el significado de Ek se debe interpretar como Lucero, algo así como el jaguar luminoso, el Jaguar-lucero; de este modo el concepto cambia y se vuelve algo celeste. Quizá sea más bien un nombre que nos quiere decir la dualidad de cielo-tierra al incluir al lucero y al jaguar.
Estamos justo en el punto de entrada a lo que es el núcleo de esta ciudad que estaba reservada a las clases más altas y privilegiadas. Lo primero que notamos son las murallas, no una, no dos, son tres las que circundan a esta acrópolis. De tres metros de ancho y, dicen de un metro y medio de alto. Este acceso es un sencillo laberinto en el que no se puede ir de frente, sino en un ligero zig-zag se llega al primer punto extraordinario del sitio: su arco de entrada.
Aquí ya pasamos la segunda muralla, la tercera se integra al arco, el cual es el tradicional y típico arco maya que fue la solución arquitectónica y estética utilizada por esta civilización para crear a partir de este diseño la bóveda en forma de triángulo trunco.
Arco maya o Arco falso, como gustes llamarlo. Aquí es donde nos topamos con este perro que, cual guardián de la zona toma pose casi, casi de dignatario. En lengua maya Pek significa perro, Balam jaguar, así que este el el Pek de Ek Balam.
Desde este punto alto vemos el arco de entrada con mayor claridad y en su total majestuosidad. Dicen que era allí en donde se realizaba un ceremonial de purificación que aquellos elegidos, que fueron muy pocos, tenían que hacer para poder ingresar a la zona la cual estaba totalmente cubierta de piedras pulidas, impecables, los edificios que ahora se ve de un cierto tono amarillo propio de la piedra, estuvieron pintados de rojo.
Una vez que caminamos un poco más adelante del arco, vemos del lado derecho un edificio que en la parte sur es de forma circular, quizá este es el antecedente arquitectónico para luego construir el palacio del Adivino en Uxmal. Se dice que la construcción de Ek Balam comenzó en el año 300 antes de Cristo, durante el periodo conocido como Clásico en la civilización Maya y su florecimiento mayor estuvo entre el 500 y 800 de nuestra era.
Estamos en marzo, días antes del equinoccio de primavera, el clima es bueno, un poco nublado pero no hay amenaza de lluvia, esto nos permite caminar tranquilamente, sin el agobiante calor que dicen, para el verano se vuelve intolerable debido, principalmente, a la elevada humedad que hay. Así que aprovechemos esta bondad y caminemos un poco más...
Del lado izquierdo vemos el juego de pelota, la distancia entre edificio y edificio es corta, el recinto arqueológico es más bien compacto, veo una diametral diferencia si comparamos con otras ciudades mayas en las que se ubican sus construcciones en espacios muy amplios. Esta era una ciudad de acceso limitado, razón por la cual su tránsito era más bien poco, para los afortunados que tenían el privilegio ser autorizados para entrar en tan especial recinto.
En este juego de pelota vemos en la cabecera norte una cámara de cada lado en la que había un baño ritual antes de comenzar el juego. Aparecen algunos decorados sobre las piedras altas...
Podemos ver en ambos lados del juego de pelota la escalinata central par que, desde lo alto, se pueda apreciar mejor esta contienda que dicen, era de vida o muerte.
Entramos al recinto sur, la parte central (hacia el sur) es donde se levanta ese edifico ovalado, teniendo su frente hacia el edificio principal, localizado al norte, del lado izquierdo están estas dos edificaciones conocidas como las pirámides gemelas. Aparece la dualidad.
Estamos en la parte alta, cuentan que allí había una pila que se llenaba de agua para que, durante fechas específicas, seguramente días como hoy, en que se da el equinoccio de primavera, se podían ver los astros, no directamente al cielo, sino en el reflejo dentro de la pila.
Esa perfección de línea, de geometría, tan característica en la arquitectura maya la vemos desde lo alto del templo ovalado apuntando hacia el oriente. La palapa que aparece es donde se localizan dos estelas.
Estas son las pirámides gemelas vistas desde lo alto del templo ovalado.
El cuerpo central en el templo ovalado, a un lado de donde aparece esta turista que saluda a la cámara es donde se ubica la piscina ceremonial.
Las otras pirámides gemelas, las que están hacia el oriente.
Estos son los frutos de la Ceiba, el árbol sagrado maya.
El letrero nos indica que debajo de este árbol sagrado se realzan algunos ceremoniales, desconozco cuales sean, quizá algunos relacionados con las "enramadas".
La parte trasera de las pirámides gemelas del lado oriente, a pocos metros de allí aparecen nuevamente las murallas que delimitan a esta ciudad sagrada.
Comenzamos a girar en rededor de la pirámide principal, por la parte que aun no está reconstruida, vemos los montones de piedras que, por efectos del tiempo, se han ido desprendiendo.
Damos con la primera cavidad subterránea. No se trata de cenotes, sino de recintos ceremoniales. Este se localiza del lado nor-oriente.
Otro acceso a otro recinto ceremonial subterráneo, ese del lado nor-poniente.
Nos podemos dar cuenta de las colosales dimensiones del edificio principal, esta es la parte trasera.
Es cosa de doblar aquí para ver el enorme edificio, el principal, de Ek Balam.
Y llegamos al punto medular de la ciudad sagrada de Ek Balam, la pirámide principal en donde se desarrolla el impresionante decorado en estuco que muestra las fauces de un jaguar y en su interior una serie de esculturas que nos dicen de la maestría de los artistas y decoradores de hace montones de centurias. De eso no te puedo contar mucho pues, la escalinata que vemos tienen una pendiente que para mi se vuelve complicada y prefiero no subir, como quiera, lo mucho que he visto en Ek Balam me ha embriagado y creo que es un recinto de enorme belleza que su apenas kilómetro cuadrado es más que suficiente para adentrarnos en la estética de esta civilización.
Según el glifo que corresponde a Ek Balam el significado es Lucero Jaguar. Saludos.
ResponderEliminarEs un placer saborear todas estas magnificas fotografias Benjamin, por aqui seguimos aprendiendo de tu ''Tirada a perder 2013'', a leguas se nota lo perdido que andas y lo mucho que sufres. A veces es hasta dificil darle seguimiento y digerir tus plorificas publicaciones. Saludos
ResponderEliminarHay algunas impresiciones en esta publicación, los huecos o cavidades que hay en suelo no son recintos ceremoniales son chaltunes que los Mayas usaban para almacenar agua lluvia.
ResponderEliminarSaludos desde Yucatan, México.
Hola desde Italia queria preguntarle, si usted sabe, si es cierto que en la Acropolis hay pinturas y si las murallas de Ek' Balam son dos o tre, ya que en diferentes sitios en internet vienen diferentes datos. Gracias. Mi correo eletronico es: darios72_mira@outlook.com
ResponderEliminar