sábado, 10 de agosto de 2013

Las Cruces Pasionarias del templo de San Francisco en Tepeapulco, Hidalgo.

  A Tepeapulco llegué luego de haberme enterado de que Hernán Cortés, el conquistador de México había construido allí una casa. Recordé que solo había escuchado, y visitado, la que tuvo en la Antigua, en Cuernavaca y luego en Coyoacán. Busqué más del tema de esas casas y encontré que también en la ciudad de México tenía no una, sino varias casas, pensé en documentar todos los sitios pero, por una cosa y por otra, no pude llegar a todos ellos, la ruta la cambié en el camino. Como quiera, me cercioré de que si tuvo esas casas en México y no lo que es hoy el Palacio Nacional, sino por el rumbo de la que fuera calle de San Francisco

  Lo primero fue buscar en el mapa la ubicación de ese pueblo, por el nombre pensaba que estaría en el Estado de México, pero no es así, se localiza en el estado de Hidalgo, muy cerca de los llanos de Apam, aquella zona riquísima que fue la principal productora de pulque en el siglo XIX y las primeras décadas del XX, de hecho pasé muy cerca de Ometusco, la hacienda que fuera una de las principales, o la número uno, en cuanto a producción de pulque se refiere. Pensé Tepeapulco estaría más cerca de la ciudad pero no es así, seguimos por ciudad Sahagún y, un poco más adelante, llegamos al lugar: una verdadera maravilla.

  Tenía en mente ir de inmediato a la casa que dicen la mandó construir Cortés, pero, cuando vi la estructura de la parte antigua y como en la parte más alta del pueblo se levantaba un templo, no dudé ir primero a ese sitio, el cual se construyó en el basamento de lo que fuera un antiguo templo prehispánico.

   Una capilla, más bien grade, se levanta a la izquierda, a la derecha está el convento, el atrio es grande, hay vestigios de lo que fuera cementerio, y más o menos al centro se encuentra la cruz atrial, diferente a todas las que he visto hasta el momento, pues esta no está al centro del atrio, sino empotrada al lado derecho de la entrada principal, entre el templo y el convento.


  La capilla es sencilla, por así decirlo, tiene una ornamentación exquisita en la parte central, vemos claramente los anagramas del Jesús al centro, de María a la izquierda y de José a la derecha... eso me hace recordar el acomodo que había antes del Concilio Vaticano II, en que los hombres se sentaban de un lado y las mujeres en el otro, cuando se asistía a misa.

  En la parte baja de esa parte central ornamentada, vemos otros anagramas, los que son en base a letras superpuestas o comprimidas, MA para María IOE para Joseph. Mirando nuevamente en la parte alta, al centro vemos el IHS, eso me recuerda que vi en Huichapan, Hidalgo.

  Pero esto del IHS no es lo único que me recuerda a Huichapan, también la distribución que hay en la parroquia de San Mateo y la capilla contigua... mira.

  Aquí, desde la puerta de la capilla alcanzamos a ver la cruz atrial empotrada.

  La imposición de los estigmas a San Francisco es lo que encontramos en la parte central de la fachada del templo.

    Y aquí está, la primera cruz atrial empotrada, una Cruz Pasionaria, de las primeras que se hicieron en Nueva España.

  Notamos que en el travesaño hay un agujero de cada lado, seguramente se colocaba un santo Cristo de madera durante los ritos solemnes de la Semana Santa.

   De esta cara parece surgir una voluta... (la palabra), notamos debajo el martillo con el que fue clavado Nuestro Señor, elemento imprescindible en las cruces atriales.

  Esta forma no logro identificarla, es el otro costado del palo vertical.

  Una segunda cruz atrial empotrada aparece en el portal de peregrinos del convento. Hay una especie de oración pintada en la pared...

   Esta cruz, más que empotrada se encuentra dentro de un nicho u hornacina, aparentemente es sencillo su ornamento...

 Pero al verlo de cerca vemos que no es nada sencillo, hay la representación de cuando Jesús iba a ser colocado en la cruz.  

  Y ya dentro del templo vemos una tercera curz, Cruces Paionarias, es el nombre correcto para las que se encuentran aquí en el templo del ex convento de San Francisco en Tepeapulco, Hidalgo.

 La ubicación de esta cruz es dentro del altar mayor, en la pared del lado del Evangelio, es decir, del lado izquierdo. Y la escena que allí se representa es el descendimiento de Nuestro Señor.

  Pero si ya estamos sorprendidos por estar en un sitio en donde hay tres cruces atriales, será bueno saber que hubo una cuarta, que era la más notable de todas, solo que, esta cuarta cruz, fue trasladada a la ciudad de México para colocarla en el atrio de la Catedral, se le conocía como la Cruz de Mañozca.

  Y si una cruz atrial fue llevada al templo máximo de la Nueva España, la Catedral Metropolitana, fue por algo, seguramente su belleza, de la cual ya nada queda. Sigamos conociendo el templo de San Francisco en Tepeapulco, Hidalgo.




 


 
 


   Ahora si, estamos ya lisos para continuar la visita, seguiremos al Convento y luego a la que fuera la Casa de Hernán Cortés. Y descubrir el Acueducto. Me sigo sorprendiendo con la cantidad de maravillas que el estado de Hidalgo guarda calladamente.

1 comentario:

  1. los anagramas presentes en la fachada en la parte inferior son los de ana y joaquin abuelos maternos de jesus segun la tradicion.

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