martes, 10 de junio de 2014

Del cine mexicano y mujeres malas que son muy buenas: Agustín Lara, "El Flaco de Oro".

 nostalgia.
(Del gr. νόστος, regreso, y -algia).
1. f. Pena de verse ausente de la patria o de los deudos o amigos.
2. f. Tristeza melancólica originada por el recuerdo de una dicha perdida.

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Monumento a Agustín Lara en Tlacotalpan, Veracruz.

    Andaba por las muy coloridas calles de Tlacotalpan y su imagen apareció una y otra vez, sea en el nombre de una de sus calles, que en el museo que sobre su persona se organizó allí, que en la Casa de la Cultura que lleva su nombre. Se dice que Agustín Lara nació allí, en Tlacotalpan, que el lo afirmaba, pero nunca se ha podido comprobar, forma parte de la leyenda que en su momento fue urbana y que ahora está en el anecdotario popular mexicano.

    Quienes contamos con al menos medio siglo de existencia, recordamos que, de niños, en esas películas prohibidas en donde aparecían "viejas encueradas", como "monas del jajá", se fumaba mucho, todos las escenas ocurrían en cabarets, en calles oscuras, regularmente escenas de bar, de gente embriagada, del malo que abusaba de la mujer buena y que la obligaba a hacer cosas aun más malas. Escenas en las que ocasionalmente había golpes, cachetadas, muchas lágrimas, arrepentimiento, perdón, venganza... en fin, los argumentos eran casi los mismos y la moraleja predominante era aquella de que: "El bien siempre triunfará sobre el mal", concepto nada nuevo en un país en el que, al ser evangelizado, más de cuatro siglos atrás, esa era precisamente la frase más usada.

   Para mi, quizá para ti también, las películas con o sin Agustín Lara, esas del cine de la llamada Época de Oro, esas que se recreaban en los "lugares non santos" me remiten de inmediato a un tiempo ya ido en el que se entretejen los recuerdos, regularmente de mis padres, que, siendo ellos de esa época, gustaban de los melodramas y de la música de Lara, mientras yo, a hurtadillas, rallaba los discos para que, los dejaran de escuchar ya que esa voz y esa música me parecían enfermizas. Claro es que, ahora entiendo lo que es la nostalgia y lo que ella implica. Hace no mucho, viendo en Youtube un video de apenas hace 15 años producido, de Fey, una chica comenta: "como me trae recuerdos esa canción", allí confirmé de que todos, sin importar edades, estamos sujetos a la nostalgia.

    Y dentro de los pasajes la leyenda del "Músico Poeta", debemos agregar una más: su nombre verdadero, el cual, dentro del más puro estilo barroco del siglo XVIII mexicano, era: Ángel Agustín María Carlos Fausto Mariano Alfonso Rojas del Sagrado Corazón de Jesús Lara y Aguirre del Pino.

 Solamente una vez ame en la vida,
solamente una vez y nada mas
una vez, nada mas en mi huerto brillo la esperanza,
la esperanza que alumbra el camino de mi soledad.

Una vez, nada mas se entrega el alma
con la dulce y total renunciación,
y cuando ese milagro realiza el prodigio de amarse,
hay campanas de fiesta que cantan en el corazón.

(¿La quieres oír? entra aquí. Otra más, Piensa en Mi.)






















   Esta estatua de Agustín Lara se encuentra en Veracruz, en el barrio de la Huaca, las demás fotografías las tomé en Tlacotalpan.





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