miércoles, 20 de agosto de 2014

"La Feria de San Marcos" el controvertido mural de Barra Cunningham.

    La primera vez que visité el Palacio de Gobierno de Aguascalientes me sorprendió, especialmente, la distribución de su patio, más aun, los caprichosos arcos que lo rodea. Al entrar me percaté del interesante trabajo que Osvaldo Barra desarrollo en sus murales en donde relata la historia de Aguascalientes, pero, esa vez no subí a la planta alta, por lo tanto no vi el mural complementario, el conocido como La Feria de San Marcos. Ahora que vuelvo a este lugar llego con la intención de ver exclusivamente ese mural, el cual fue catalogado en su momento con irreverente por retratar en él dos cosas: a una prostituta y a varios personajes de tendencia gay, como se le denomina en la actualidad, solo que, en aquellos tiempos eran conocidos como "los jotos de Aguascalientes".

   Para todos aquellos que somos del Bajío el oír la referencia de "los jotos de Aguascalientes" no es, bajo ninguna circunstancia algo peyorativo, mucho menos de mofa. Sucede que una de las grandes tradiciones que se vivían en todos nuestros pueblos del centro de México que, como reza el dicho "a cada capillita le llega su fiestecita", ocurría que a cada pueblo nos llegaba la feria anual y el ir a cenar a ella, específicamente enchiladas o mole era en un sitio bien específico: con los jotos de Aguascalientes.

   Varias son las crónicas que relatan este detalle, común en los cincuentas y sesentas del siglo XX, en las que la referencia a la buena comida, tradicional, casera, de calidad superior que estos personajes servían en los improvisados restaurantes que durante la época de la feria volvía punto de reunión de todos aquellos que querían paladear, especialmente el mole que allí se preparaba. Y algo que era tan normal verlo cada año en las ferias de los pueblos del Bajío llamó poderosamente la atención del pintor chileno que en 1962 decidió incluir la escena dentro de todo el concepto que engloba ese relato gráfico de la feria más grande de México: la de San Marcos en Aguascalientes.

   Osvaldo Barra Cunningham nació en Concepción, Chile, el 14 de febrero de 1922, atraído por el movimiento muralista mexicano, llega a nuestro país en 1953, en donde se le presenta la oportunidad de conocer a Diego Rivera y, no solo eso, sino ser aceptado como discípulo del pintor. Para 1960 logra la encomienda de pintar los muros de la que fuera espléndida mansión de los Rincón Gallardo, ya convertida en Palacio de Gobierno, complementando su obra con el mural que hoy nos ocupa, el cual desarrolla dos años después.

   La "pelos de oro", famosa prostituta del lugar aparece también en el mural, y fue objeto de todas las críticas para que fuera cambiada o eliminada pues, pensando en la moral de lo sesenta su presencia "ofendía" seguramente a más de dos.  Al ver con atención este mural, notamos la clara influencia de Rivera, los ojos grandes, los rasgos indígenas en muchos de los personajes, la crítica social al poner codo con codo la opulencia y la miseria, la encumbrada dama de la sociedad apostando buenos pesos, junto a la mujer que extiende la mano para recibir una limosna. 

   Interesante sin lugar a dudas se convierte este mural, fiel reflejo de la sociedad provinciana aun "inocente" que esperaba el baile anual, la orquesta de moda, la elección de la reina y tantas otras cosas más que solo durante los días de la Feria se presentaban en la apacible vida cotidiana de la santa provincia mexicana...
















La historia de los murales del Palacio de Gobierno de Aguascalientes la puedes ver aquí.



1 comentario:

  1. Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y José Clemente Orozco además el ya mencionado en este artículo, fueron los pioneros de los "Grafiteros" en México. Convirtiendo tan solemnes y sublimes recintos Virreinales en unas semejantes nauseabundas paredes rayadas en baños de cantina, carentes de cual finura en trompe l'oeil y toscas pinceladas. El tan ubicuo grafiti por la juventud en las urbes Mexicanas son homenaje y oda a los mencionados “loables” muralistas.

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