miércoles, 9 de junio de 2010

Luego del Corpus Viejo es momento de conocer Temascalcingo, en el Estado de México

Pues, como en muchas otras poblaciones del país, la tradición de las “mulas” asociadas al Jueves de Corpus se ve también aquí en Temascalcingo, soy sincero, solo encontré a un vendedor de estas piezas de arte que hace años eran objeto de regalo entre toda la gente, a todo mundo se le compraba su mula y de todo mundo recibías tu “mulita”, supongo la razón de esa tradición ya la conoces, de lo contrario, mándame un correo y con gusto te la cuento.


Temascalcingo se ubica en la parte norponiente del Estado de México, muy cerca de los límites con Michoacán y Querétaro, si vas por la autopista México-Guadalajara, en el tramo Atlacomulco-Maravatío, encontrarás la salida a Temascalcingo, cruzarás el río Lerma y es allí donde comienza el espléndido valle, denominado Temascalcingo-Solís se encuentra ese remanso de paz. Como muestra tienes esta vista al valle mencionado.


Como ya te lo conté en los artículos anteriores, la parroquia de Temascalcingo está dedica a San Miguel Arcángel, es de estilo Neoclásico tardío y tiene un estilo Tresguerras, el de Celaya, digamos más bien, el hijo pródigo de Celaya.


Como marca la tradición, frente a la Parroquia hay un gran atrio, aquí han tenido a bien mantener un jardín, al frente está la plaza principal y del lado izquierdo se ubica la presidencia municipal que es el edificio que estamos viendo.


Y si de hijos pródigos hablamos, aquí esta el de Temascalcingo, el pintor José María Velasco Gómez, el mejor paisajista que ha tenido México en todos los tiempos. Su obra es de una soberbia belleza. Si no la conoces, te pierdes de lo mejor que hay en pintura de paisaje en México.


Una de las características en la construcción en algunas zonas del Estado de México es el uso de los artesonados, en este caso, lo que vemos es el que existe en la Parroquia local, solo que, es una versión pues no está hecho de madera sino concreto (supongo), como quiera, la tradición se guarda.


Tú y mucha gente más recordará el paso de Carlos Salinas y su sexenio caracterizado, entre otras cosas, por el programa de Solidaridad. Encontramos aquí la Fuente de la Solidaridad… ni más ni menos... ¡“larga vida a CSG”!


Este es el patio de una vieja casona que fue remodelada y ahora funciona como hotel, por suerte di con el lugar, altamente recomendable por cierto. Tranquilo, limpio y de un precio bastante accesible. Y si no te convence esto, está a una cuadra de la plaza central.


De que esta casa es vieja, lo es, de que fue construida antes de la traza urbana, lo es, pues ya ni la banqueta cupo. Las piedras no se si sean para sentarse a “tomar el fresco” o son para que no se estacionen los autos. Como quiera, tiene su encanto.


Esta otra casa guarda el estilo netamente mexiquense, con esa especie de portal integrado a la casa que lo vi por todos lados en la zona que recorrí del Estado de México.


Algo que me llamó mucho la atención desde que entramos a la carretera que conduce a Temascalcingo fueron las azoteas llenas de cántaros, la verdad, con la explosión de ideas y cosas vividas en el Corpus Viejo, se me olvidó preguntar la razón de tener tantos cántaros en las azoteas.


Y la tarde comienza a caer, el sol ofrece la oportunidad de fotografiar con una coloración intensa, nos da una iluminación particular que imprime en todas las fotos ese algo que toda puesta de sol tiene, entre nostalgia, alivio, tristeza, alegría, no se, son una afortunada confusión de ideas.


Y la noche cae y en Temascalcingo experimenté la temperatura ideal. La gente me decía que hacía mucho calor, pero la verdad, yo sentí lo mejor que he sentido en cuanto a temperatura se refiere, ese frescor que solo las zonas cercanas a los bosques tienen. Aquí estamos paseando por la plaza, una tranquilidad envidiable.


Esto que parece un arco triunfal es el acceso al atrio de la parroquia, de noche, como lo estas viendo nos ofrece una atmósfera aun más bella.


Y ya más oscuro es hora de retirarnos, de despedirnos de Temascalcingo, lugar ideal para pasar unos días de reposo y si tienes la fortuna de que te toque el Jueves de Corpus, la experiencia será inolvidable, te lo aseguro.


Y llegamos al hotel, se llama La Posada, te sugiero que pidas de las habitaciones antiguas, o si tienes un poco más, entonces aprovecha y quedate en la suite. Tiene una vista a toda la plaza. Han sido muchas experiencias, ser turista agota… hay que descansar.


Así que, yo me voy a soñar con los angelitos… ¡Gracias Temascalcingo!, por mantener vivas las antiguas tradiciones de nuestro querido México, querido con y sin Bicentenario.


Que bello es México, lástima que no todos nos atrevemos a conocerlo así como es…



2 comentarios:

  1. buenisimooooooooooooooo, me encantó

    ResponderEliminar
  2. sin duda es un lugar magico, lleno de tradiciones y costumbres que siguen presentes año tras año. el regresar al lugar donde naciste es recordar cada dia de tu infancia. tiene atardeceres muy tranquilos y romanticos.

    ResponderEliminar