Chamacuero es el nombre original de la población guanajuatense que conocemos como Comonfort. La razón de que se le haya cambiado el nombre purépecha que significa "Lugar donde se pierde el Limite" es debido que en las inmediaciones de la ciudad, al sur, fue asesinado Ignacio Comonfort. Un evento de esa naturaleza había ocurrido antes, muy al principio de la evangelización del actual estado de Guanajuato, unos frailes franciscanos llevaban un Cristo hecho en Pátzcuaro con la técnica de pasta de caña de maíz cuando fueron emboscados y asesinados por unos pames, el Cristo es conocido como El Señor de la Conquista, se venera en la parroquia de San Miguel de Allende y la imagen original está en la parroquia de San Felipe Torresmochas.
Hace poco Comonfort adquirió el título de "Pueblo Mágico", son varias las cosas interesantes que hay allí. Una capilla, de la Santa Cruz que era (quiero pensar) de indios, por las característica que tiene, su ubicación y, especialmente, por el tipo de cruz que allí se venera. Lo que ahora vemos en la imagen es la parroquia de San Francisco, la cual, dicen, yo no lo he podido identificar, contiene una pintura de Murillo... creo es más bien leyenda urbana.
Lo que sí hay en esta parroquia es una muy interesante pintura de ánimas, de gran formato que te sugiero ver con atención cuando visites el lugar.
Al centro aparece la Virgen María portando al Niño Jesús, ambos llevan una especie de aro que no identifico como rosario. Están custodiados por los arcángeles Miguel y Gabriel. Al lado derecho aparece San Francisco de Asís y a su derecha está San Antonio de Padua, mientras que a la izquierda está Santo Domingo de Guzmán y San Nicolás de Tolentino. Me parece curioso que aparezca un santo agustino en una pintura franciscana, quizá sea porque esa evangelización comenzó por Pátzcuaro y Valladolid, lugares en donde había presencia de ambas órdenes. Lo de Santo Domingo no es de extrañar ya que esa era ley, que siempre aparecieran juntos, ya que ambos fundadores de órdenes religiosas fueron contemporáneos.
En la parte baja se desarrolla la escena del purgatorio, con la habitual escena de pánico y sufrimiento, recordemos que en tiempos virreinales muy pocos sabían leer, así que los mensajes que la Iglesia enviaban eran gráficos e intensos. Los pecadores están padeciendo su pena para purificarse y lograr la "vida eterna", sus realezas pueden ser identificadas por los gorros, sombreros y coronas.
El Arcángel San Gabriel, San Francisco de Asís, San Antonio de Padua rescatando un ánima pecadora del infierno... En la parte alta aparece al centro el Espíritu Santo, a un lado el Padre Eterno, del otro Jesús y, entre ellos el mundo. Los doce apóstoles del lado izquierdo y las Once mil vírgenes a la derecha.
Interesantes son los retablos del crucero... ahí veo algo nada común por la región del Bajío en termino de ornamentos: los espejos. Esos recuerdo haberlos visto profusamente utilizados en la arquitectura virreinal peruana, en Cuzco específicamente.
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