Hacienda de San Pedro Piedra Gorda, Cuauhtémoc, Zacatecas.

A media hora del pueblo de Luis Moya, si seguimos por la Carretera 45 pasaremos muy cerca de la Hacienda de San Diego, está en ruinas a un kilómetro a la derecha de la carretera, pero nosotros tomamos el camino pavimentado que nos lleva al pueblo de Cuauhtémoc. Cuando iba por el camino me vino una gran confusión pues ese fue el nombre que vi en el letrero de la carretera, a donde yo quería llegar era al pueblo de Piedra Gorda...

Lo que vemos ahora es el casco de la Casa Grande de la que fuera la Hacienda de San Pedro Río Verde, uno de los varios nombres que tuvo el lugar, en la actualidad funge como presidencia municipal pues la hacienda, fundada originalmente en 1640 bajo el nombre de San Pedro se volvió, como es el caso de varios pueblos de Zacatecas, un municipio y entrado, o para comenzar el siglo XX.

Siendo esta zona de alta productividad vemos el desfilar de una serie de nombres de prosapia e hidalguía (comprada) como dueños del lugar, comienza con Diego Termiño de Bañuelos, continua con Domingo Francisco de Calera y Entremaño y luego don José Beltrán Barnuevo. Como nos hemos ido adentrando en el mundo de las haciendas a lo largo de varios artículos, ahora veamos una nota que nos dirá como se le sacaba provecho a todo, el propietario sería siempre beneficiado, incluso por arrendar.

"Los arrendatarios no eran solamente los dueños de las grandes haciendas, ya que también los pequeños propietarios completaban sus ingresos con el arriendo de una o dos fanegas de sembradura. Don Bernabé Loera en 1766 arrendaba a la Hacienda de San Pedro Piedra Gorda un rancho por el que pagaba 20 pesos. En 1762 don Juan Bernabé Fragoso pagaba 20 pesos por la renta de un rancho a los dueños de San Pedro Piedra gorda. Este mismo año don Jacinto Antonio Pedroza arrendaba una sementera, por la cual pagaba 30 pesos y sembraba maíz y frijol.

Aunque la siguiente parte del texto se refiere a ranchos y haciendas en el actual estado de Aguascalientes, igual aplica para darnos la idea de los arriendos: "Don Cristóbal Romo de Vivar arrendaba el rancho del Agostadero por el cual pagaba 50 pesos que se cumplían el mes de mayo, fecha habitual de los arriendos porque era cuando se iniciaban los cultivos de maíz. En el rancho tenía, además de las labores que le permitían tener en sus trojes 500 fanegas de maíz y nueve de frijol, su ganado en donde predominaban las yeguas, pero también había 72 reses, 87 bueyes y 283 ovejas". (1)

Definitivamente tener pesos era de los ricos, si con 20 de ellos al año se tenía una parcela y con 50 un rancho, bien nos damos idea del valor de los pesos en ese entonces. Ahora bien, ¿a que se refiere con lo de las fanegas? Una Fanega de cereal es el peso de cereal que cabe en el volumen de una fanega, es decir en 55.5 litros. De allí se deriva el peso para la fanega de trigo el cual es de 43.2 kilos. Había otras medidas: quintal, arroba, libra, cuarterón, onza, adarme y tomín, entre otras. (2)

La genealogía que encontramos en San Piedro Piedra Gorda es la de varias grandes familias, acaudaladas todas ellas, de Zacatecas: "Restaurando el brillo familiar,en 1815 don José Guadalupe García de Roxas contrajo matrimonio con Mariana de Jesús Loreto del Carmen Josefa Aniceta del Santísimo Scramento Elías Escobedo Beltrán Barnuevo de la Vega, de 15 años, nacida el 21 de abril de 1899 en la hacienda de San Pedro Río Verde, más conocida como San Pedro Piedra Gorda, en el estado de Zacatecas, en el camino entre Aguascalientes y Zacatecas...

"Ella procedía de una familia zacatecana antigua, su padre, Ángel de Elías Beltrán, Alguacil Mayor del Santo Oficio en Zacatecas, hijo de María Loreto Beltrán Barnuevo, hermana de Jacinto María, dueño de las haciendas de San Pedro Piedra Gorda y Trancoso, casado con Ana Josefa Bravo de Acuña, tercera condesa de Santa Rosa, descendiente del minero de Vetagrande y dueño de las haciendas de Malpaso y La Quemada; de Baltasar Termiño de Bañuelos y de Cristóbal de Oñate, fundadores de Zacatecas, y de Isabel Cortés Moctezuma y de don Luis Velasco, el viejo, segundo virrey de la Nueva España..." (2)

Miles de fanegas de trigo y otros cereales cabían perfectamente en esta enorme troje que se ubica en la parte trasera de lo que actualmente es la plaza del pueblo de Cuauhtémoc. ¿Por que habrán decidido cambiarle el nombre de San Pedro por el del último tlatoani mexica? Mientras damos con la respuesta sigamos paseando por lo que ahora es la cabecera municipal.

Un zacatecano, nacido en Jerez, pero muerto en San Pedro Piedra Gorda fue Francisco García Salinas, al que se le considera el creador del federalismo en México. Su busto lo encontramos justo en la arcada de la Casa Grande, lo que ahora es la Presidencia Municipal.

Resulta que en 1949 se discutía mucho sobre el lugar de sacrificio o, mejor dicho, entierro, del último emperador azteca, "el águila descendente", Cuauhtémoc. Una historiadora, justamente nacida en este pueblo de San Pedro Piedra Gorda, Eulalia Guzmán Barrón (1890-1985) fue quien estudió a profundidad la vida del tlatoani, su teoría la mantuvo hasta el final de sus días asegurando que los restos de Cuauhtémoc se encontraban en Ixcateopan, Guerrero. La señora de lentes, junto a Diego Rivera es doña Eulalia Guzmán.

Así lucía la Hacienda de San Pedro a mediados del siglo XIX. El templo que se ve al centro, es el mismo que ves en la primera foto. El pórtico de la derecha, es el que aparece en la quinta fotografía, las dimensiones no han cambiado en mucho, solamente ese arroyo que la cruzaba, que ahora está canalizado y que le nombran con el emblemático apelativo de "la acequia".

La acequia es ahora la calle que se ve en las fotografías sexta y séptima, solo unos cuantos cambios han habido en la antigua Hacienda de San Pedro Piedra Gorda.

Y a quién vemos en la fotografía fue una de las últimas propietarias, doña Mariana Escobedo Beltrán Barnuevo.

Fuentes:

1.- Rojas Beatriz. Las instituciones de gobierno y la élite local. Aguascalientes del siglo XVII hasta la Independencia. El Colegio de Michoacán. Zamora, 1998.

2.- http://www.lavozdesalamon.com/articulos_archivos/antiguos_pesos_y_medidas.htm

3.- De los Reyes, Aurelio. ¿No queda huella ni memoria? Semblanza iconográfica de una familia. UNAM. México, 2002.