Cuando estaban las celebraciones del Bicentenario a pleno en 2010 (el a pleno debe ir entrecomillado), se dijo una y otra vez en todos los programas, series y libros que, en buena medida, la implementación y consolidación de Vales Reales fue el detonante del movimiento de liberación. Quienes estudiamos el desarrollo de las Haciendas mexicanas llegamos siempre al punto en el que son afectadas por la mencionada consolidación. Para ahorrarte un poco de tiempo en el siguiente (casi tweet) que extraigo del apasionante estudio de la doctora Von Wobeser hace al respecto:
"La Consolidación, como se le conoció de manera abreviada, dispuso que las catedrales, parroquias, conventos masculinos y femeninos, juzgados de capellanías y obras pías, cofradías, hospitales y colegios, entre otros, se desprendieran del dinero líquido y de los bienes raíces y capitales de inversión que poseían y los depositaran en la Tesorería Real. Los capitales líquidos debían ingresarse directamente a las cajas de Consolidación que se establecerían en las tesorerías reales. Los bienes raíces se rematarían y el producto de su venta se ingresaría a las mencionadas cajas. En las zonas rurales, la Consolidación contribuyó al empobrecimiento de los pueblos indígenas al despojarlos de dos terceras partes de sus fondos de cajas de ahorro. El hecho de que la Consolidación sólo haya tenido efectos negativos se debió a que desde sus inicios careció de una finalidad social; únicamente se planteó como medida extractiva. Los mismos funcionarios que la diseñaron previeron esta situación al señalar que acabaría “de arruinar aquellos países de donde queremos sacar el jugo”
Fuente:
Von Wobeser, Gisela. La consolidación de vales reales como factor determinante de la lucha de independencia en México, 1804-1808. Historia Mexicana, vol. LVI, núm. 2. El Colegio de México. México. 2006, pp. 373-425. Para leer el ensayo completo, entra aquí.
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