viernes, 22 de enero de 2010

Tula, en el estado de Hidalgo, otro lugar que ofrece maravillas

Y abordamos, no en este caso un Flecha Amarilla, sino un AVM (Autobuses del Valle del Mezquital) y llegamos a Tula, ciudad más conocida por la Refinería que por su legendaria civilización, la cual formó la base de lo que es México, si tu crees que la base está con los Aztecas, tienes un retraso de varios siglos, así pues, llegamos a Tula y de la terminal derechito al Jardín Principal para de allí orientarnos y buscar un hotel y lanzarnos a conocer algo que, seguro estoy, será una maravilla.


Lo primero que topamos es una feria con sus muy característicos puestos, en este caso los de mole, ya que una ciudad próxima a Tula es famosa por su gran producción y variedad de moles.


Claro es, te lo he anotado ya varias veces, que una vez vista la plaza central o jardín principal, nos vamos ¿A dónde? Pues si, en efecto, a la parroquia, en este caso a la Catedral, con ver la puerta te podrás imaginar lo que el interior contiene.


Almeas, techos altísimos, una cierta oscuridad que impregna el recinto de misticismo y antigüedad. Estamos ya dentro del templo de San José, parte del convento franciscano del mismo nombre, antiguo tanto como que data de 1529, es decir, apenas 6 años después de la llegada de la orden de los hijos del Seráfico Padre a la Nueva España.


Esta, al igual que todas las construcciones de las décadas de los veinte y treinta del siglo XVI son con un marcado estilo medieval, paredes de un grosor impresionante, una altura impactante y ni un solo retablo, todas planas, lo único que destaca aquí es el púlpito, labrado todo en piedra. La decoración es mínima, una cenefa y no más, nota muy bien la forma de la puerta de acceso a este lugar de predicación.


Me veo obligado a usar otro termino arquitectónico: PECHINA, siempre son cuatro y son los basamentos de los cuales surge la bóveda. Esta, seguramente fue añadida al templo original, pues cuando fue construido el convento era bastante complicado levantar bóvedas. Por su línea sólida seguramente será posterior al menos un siglo. No está de más recalcar que es la primera pechina que veo n tiene una sola pintura de Evangelistas o Virtudes o Doctores de la Iglesia.


Seguimos en el mismo recinto, la capilla anexa al templo que es ahora Catedral de Tula, su línea sobria es impactante, ¿notaste que como decorado hay unas telas bordadas a que caen?


Y este altar es en verdad muy especial, es Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, uno de los íconos más bellos, según mi parecer, que hay. Lo que me llamó la atención es la cruz que como ofrenda tiene, hecho con cera escamada.


Y ahora vemos las almenas de la barda que circunda al atrio, este diseño si que es más “normal” si lo comparamos con el de Tepeji, este si que parece sacado de un castillo medieval europeo.


Y ni que decir de la torre de la Catedral, su línea es, disculpa que siga insistiendo en el término, pero no encuentro otro, es totalmente Medieval.


Ahora vemos al frente la parte, por así llamarla, “nueva” con la bóveda, y a la derecha la parte antigua, con sus almenas de castillo.


En el que ahora es Ex convento encontramos pinturas murales, muy al modo del XVI, en blanco y negro solamente, al santo que vemos ahora es San Sebastián, el cual lo podemos reconocer fácilmente, al ver su cuerpo del modo en que fue martirizado, con flechas.


Caminar por estos pasillos de los que fueron los primeros conventos franciscano o agustinos en Hidalgo es un momento ideal para el reposo y la meditación.


Otra pintura más, en este caso San Lorenzo, a él lo reconocemos por la parrilla que tiene en su mano, ya que él fue martirizado de este modo, siendo quemado lentamente en una parrilla. Siempre encontrarás ciertos elementos que identifican al Santo, se que no a todo mundo le gusta esto, a mi me fascina.


Y es hora de continuar, dejamos a Tula, nos quedamos con las ganas de ver la zona arqueológica, pero ya ves, lo que pasa por no fijarse por donde va el camión… este cerro, desconozco su nombre, es la manera que te indica que allí está Tula. Hay muchas poblaciones en nuestro país que sabemos muy bien cuales son con tan solo ver el cerro más próximo… seguimos paseando por el estado de Hidalgo.



3 comentarios:

  1. Fui una vez a Tula y como tu dices es un lugar muy padre.

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  2. Benja!! No puedo creer que no visitaste la zona arqueológica.. Ese cerro del que hablas se llamó Xicococ en la epoca prehispanica, hoy en día en el cerro Xicuco. Saludos!!

    Visita Tula, Hgo., y te enamoraras.

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  3. Tambien hay Balneareos de agua termal,es agua que sale de adentro de la tierra bien caliente como a 60 grados,tambien hay barbacoa,mixotes,etc,Visiten el mercado municipal hay comida en todo el dia tacos de barbacoa,comida regional etc desde las 6 am ya esta abierto,hay muchisimas cosas,visiten la capilla de san lorenzo.

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