Los Silos de Santa Mónica, Zacatecas.

Llegamos al punto en donde nos captura el extraño panorama que se nos presenta, salimos de Trancoso un cuanto agobiados y tristes por esa "masacre" de la que ha sido víctima con los vándalos del spray, el autobús enfila rumbo a Guadalupe ciudad ya conurbada con la capital zacatecana, enfilamos por un campo plano pero en bajada de una enorme loma, abundante en nopales y pastos secos, de seguro allí pastaron a placidez el ganado de los García Salinas, de pronto comienza una curva, seguimos de bajada...

Y vemos en la distancia unas extrañas formaciones, perdidas entre algunos pirules y muchos nopales, el paisaje está todo en los matices ocres que tanto me gustan, el autobús sigue su marcha, un poco en el "rush" propio del que se presenta al atardecer, cuando la demanda de transporte va siendo mayor. Pasamos frente a estos silos y me quedo absolutamente sin palabras. Había visto un par del mismo diseño en la Hacienda del Jaral de Berrio y me parecieron de los mejores diseños del XIX, ahora estamos frente a veintidós de ellos.

Tengo un amigo mexicano de corazón, gringo de nacimiento, que conocí a través de este medio, precisamente, con él he ido intercambiando información de estos conos, de estos que técnicamente se llaman silos y que, según hemos ido verificando, son unas verdaderas obras de arte y tecnología, considerando que muchos de ellos llevan encima al menos un siglo y medio, que siguen en pie y funcionando aun para lo que fueron hechos o, para otras cosas, como ahora es el caso...

Seguramente tú que ahora lees esto, habrás visto en alguna parte del país, pues los hay hasta en la Baja California Sur, estos conos, estos silos que en 1960, en programa casi paralelo a la instalación de tomas de agua en las comunidades rurales con aquél diseño tan característico de la "S", las Cabezas de Águila, de las cuales ya te he hablado mucho y, también los conos que construyó Conasupo para el almacentamiento de granos a lo largo y ancho de la República, todo esto en el sexenio de don Adolfo López Mateos.

Pues la obra de Conasupo se basa en la tecología de construcción rural, de las haciendas, más específicamente, de mediados del siglo XIX, es decir, cuando Conasupo retomó la idea y el diseño, ya había pasado un buen siglo, sino un poco más de tiempo aun. La tecnología, en el caso de Santa Mónica, en donde ahora estamos, implicaba una disposición de los silos específica, así tenemos que aquí hay ocho que corren no sur a norte, doce que hacen un círculo y dos, los más grandes, dispuestos al norte de tal manera que no se hacen sobra y las entradas, que son por arriba, estaban dispuestas de manera en que se pudiera trabajar simultáneamente en todos.

La enorme propiedad que en 1824 adquirió la familia García implicaba un terreno de tales dimensiones que hoy, en un auto moderno, nos llevaría al menos 30 minutos, sin parar, ir desde la casa grande de Trancoso, hasta la casa grande de Tlacoaleche, la otra hacienda dentro de los confines de la misma propiedad. En mitad de ambas se localizan los Silos de Santa Mónica.

Otro buen amigo que la virutalidad me hizo conocer, Víctor Manuel Ramos, Cronista Adjunto de Guadalupe, Zacatecas; me comenta que: “Los Conos de Santa Mónica, datan de mediados del siglo XIX, eran parte de la hacienda de San Juan de Trancoso, que fuera propiedad de Antonio García Salinas, hermano de Francisco García Salinas, quien es considerado como el "Gobernador Modelo, Modelo de Gobernante", en Zacatecas, gracias a una pintura de Francisco Goytia, los conos consiguieron fama…”

Se dice que fue hacia 1835 que comenzaron a construirse estos Silos y pasó que luego de casi siglo y medio se les quiso dar un uso distinto y se creó un hotel, siendo cada uno de los conos una suite en un ambiente por demás distinto, especialmente si consideramos que en la década de los cincuenta, en pleno momento de la posguerra, cuando los norteamericanos descubrieron que México era el lugar ideal para vacacionar, lanzar un concepto de este tipo era algo muy avanzado para el momento.

Víctor Manuel nos comenta que "Los conos de Santa Mónica fue un hotel que se llamaba Posada de Indios Zacatecas Courts, desapareció a finales de la década de los 60s, y aun cuenta con restos de su original decoración, éste por demás singular hotel, del que se podría afirmar que era único en su genero, instaló en la década e los cincuenta del pasado siglo XX".

Entrar al lugar no me fue posible, lo rodeé completamente, pude atisbar entre la puerta de acceso, y subiéndome en las bardas más bajas, luego me di cuenta de que uno de los conos tenía una especie de ventana que era accesible, metí la cámara y esto fue lo que capté allí dentro: el baño de lo que fuera una habitación del hotel Posada de los Indios. Sorprendente...

Dentro de la parte cercada, justo en donde se forma el redondel de los silos, había una alberca, la que daba servicio a los huéspedes del hotel, todo se encuentra en el semi abandono, aunque parece que hay una o dos familias que viven allí, seguramente para cuidar la propiedad de vandalismo... algo que, por suerte se ha salvado de los vándalos amos del spray que asolan la Hacienda de Trancoso a tan solo diez kilómetros (o menos) de distancia.

Sigamos disfrutando de estas construcciones sin igual que, según luego supe, (y veremos) abundan en el estado de Zacatecas.

Aquí tenemos la vista satelital de los Silos de Santa Mónica, depurada técnica en donde se muestra el conocimiento de los movimientos del sol, las caídas de sombra, los movimientos del viento, en fin... una armonía con la naturaleza, todas trabajando para beneficio del hombre.

Y con el debido agradecimiento a la persona que tuvo a bien subir esta foto a la red, el señor Berthaud, que pasó un invierno por demás peculiar en esta zona de México. Los Silos de Santa Mónica nevados. Por cierto, Santa Mónica se encuentra en el municipio de Guadalupe, Zacatecas.